Hasta el momento, se conocía que J.R.F. y J.C.M.N., exdirigentes del Sindicato Provincial de Estibadores Portuarios Marítimo Terrestre de Huelva, habían quedado en libertad con cargos tras haber sido detenidos acusados de quedarse con unos 60.000 euros de los fondos del sindicato durante el periodo de su gestión. Pero la investigación policial no se va a quedar ahí.
Según ha podido saber Viva Huelva, los investigadores van a analizar las cuentas del sindicato cuando los anteriores gestores, denunciantes del caso, las controlaban, así como una serie de transferencias que se realizaban al sindicato y que eran procedentes, según las fuentes consultadas por este periódico, por la empresa Estihuelva, directamente vinculada con el sindicato en cuestión.
Fuentes cercanas a la investigación han descrito a esta publicación que tras tomar declaración a los acusados, han aparecido una serie de movimientos bancarios que son, cuanto menos, dignos de ser investigados. Y todos ellos son de la etapa justamente anterior a la de los exdirigentes libres con cargos. Más concretamente, de la etapa cuando los denunciantes del presunto desfalco llevaban las riendas económicas de la organización.
Según las citadas fuentes, al menos desde enero de 2010 y hasta enero de 2011, en la cuenta corriente del sindicato se efectuaba un ingreso mensual, siempre a finales de mes, de 6.705,62 euros. “Las transferencias están hechas desde la cuenta bancaria de Estihuelva”, aseguran las fuentes. Coincidiendo con ese periodo de ingresos regulares presuntamente procedentes de Estihuelva, se llevaba a cabo una serie de reintegros a través de cobro de talones por parte de los gestores del sindicato. Las cantidades cobradas oscilaban entre los 900 y los 959 euros, y la mayoría de los meses eran siete los talones que se cobraban, aunque hubo meses que se cobraron hasta 14 cheques con estas cantidades.
Casualmente, o no, una vez que las transferencias de 6.705,62 euros se paralizan, a finales de enero de 2011, también se dejan de cobrar los citados talones, siempre atendiendo a las citadas fuentes cercanas a la investigación.
Así las cosas, los miembros de la Unidad de Delitos Económicos de la Policía Nacional de Huelva tratarán de dilucidar el porqué de esas transferencias, para qué se destinaba ese dinero, y la legalidad o no de los cobros de talones que aparecen en las cuentas del sindicato.
De esta manera, una vez que salió a la luz la irregularidad en el manejo de las cuentas del Sindicato de Estibadores Portuarios de Huelva, la investigación se ha extendido, pasando de los actuales libres con cargos hasta los anteriores gestores, que fueron los que denunciaron el presunto desfalco y que ahora, al igual que Estihuelva, tendrán que responder a las cuestiones que le planteen los investigadores para saber a dónde llega la polémica gestión en las cuentas de un sindicato que, de repente, se ha hecho famoso.