La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Huelva ha condenado a un vecino de Huelva a tres años y seis meses de cárcel y al pago de una multa de 3.800 euros por distribuir sustancias estupefacientes a menores para su posterior distribución a otras terceras personas y consumo propio.
La sentencia da por probado que el acusado el día 26 de septiembre de 2011 proporcionó a dos menores, de 15 y 16 años, cinco bolsas conteniendo aproximadamente cinco gramos de marihuana cada una y una bolsa conteniendo diez gramos de marihuana.
La sustancia le fue intervenida a estos jóvenes por parte de varios agentes de la Policía quienes los identificaron al observar que al percatarse de su presencia los menores se pusieron nerviosos y le pidieron que les enseñaran lo que llevaban.
A cambio de que no se enteraran sus padres los menores accedieron a facilitar a los agentes información de la procedencia de la marihuana, identificando al condenado como el suministrador y asegurando que la venta se producía en un garaje.
Los agentes acudieron hasta el lugar y allí el condenado, al ser preguntado sobre la posible tenencia de sustancias estupefacientes en el interior, terminó entregando las sustancias que tenía.
En el garaje, propiedad del abuelo del condenado y que él utilizaba habitualmente, se intervinieron dentro de una riñonera y de una caja-nevera blanca 69,28 gramos de resina de cannabis, 198 gramos de planta de cannabis que en el mercado ilegal habrían alcanzado la suma 1.608 euros; ; además de útiles para su distribución.
Considera la Audiencia que esta persona es responsable de un delito de tráfico de sustancias que causan un grave daño a la salud con el agravante de ser entregadas a menores de 18 años.