Como cada año entorno a Pentecostés los caminos que llevan hasta la aldea de El Rocío, en Almonte (Huelva), vuelven a ser testigos de sonidos, olores y estampas que reflejan las vivencias de los miles de romeros que anhelan estar de nuevo junto a la imagen que veneran, la Virgen del Rocío, y participar en su romería.
Serán 114 filiales las que hasta el próximo viernes tomen rumbo hasta ese lugar, enclavado a los pies de la marisma de Doñana, donde los espera la Blanca Paloma, deseosa de estar más cerca de sus fieles, de compartir con ellos la devoción que le profesan y de agradecerles, con su salida procesional, a hombros de los almonteños, la madrugada del lunes 9 de junio, la visita realizada.
Al término de la jornada de hoy serán 14 las corporaciones en camino; la primera en salir fue el pasado jueves la Hermandad de Córdoba, a la que se sumó el viernes Puente Genil (Córdoba); ayer las de Écija y Osuna (Sevilla); Granada, Lucena (Córdoba), Málaga La Real, Málaga la Caleta y Fuengirola (Málaga); y hoy Almería, Carmona (Sevilla), Estepona, Jaén, Murcia y Santa Fe (Granada).
Desde distintos puntos de la geografía española, incluso desde Bruselas, los romeros inician la senda y poco a poco, a través de los caminos de Huelva, Sevilla y Cádiz irán confluyendo en un sólo punto, la aldea de El Rocío, que como cada año se prepara para recibir a una media que viene situándose en torno al millón de personas.
Nada se deja al azar, el discurrir de las corporaciones y, posteriormente, la estancia de los romeros en la aldea, está controlada gracias al desarrollo del denominado Plan Romero, coordinado por la Junta de Andalucía y que, en coordinación con el resto de administraciones -central y municipales, como el Ayuntamiento de Almonte-, despliega más de 6.000 efectivos.
Su objetivo, después de 32 años, sigue siendo asegurar el desarrollo de la romería, prevenir riesgos potenciales y responder a las posibles situaciones de emergencia durante los días de la romería del Rocío, estará activo hasta que cada una de las filiales regresen a sus puntos de origen.
La activación oficial tendrá lugar mañana, a partir de entonces, de manera progresiva, se irán incorporando los efectivos y poniendo en funcionamiento los distintos servicios; de los efectivos desplegados unos 3.500 se ocuparán específicamente de las tareas de seguridad, mientras otros 600 serán sanitarios y otros 900 de apoyo logístico e infraestructuras, a los que se suman otros 700 de intervención, entre ellos los efectivos del Plan Infoca, ya que las previsiones anuncian altas temperaturas.
El miércoles, la Hermandad Matriz de Almonte, organizadora de la romería, llegará en primer lugar a la aldea de El Rocío para servir de anfitriona a todas sus filiales que, a partir del viernes, comenzarán a participar en los actos centrales de esta cita religiosa, será la Presentación de Hermandades, que por segunda vez se celebra en dos sesiones.
La hermandad de Santa Fe (Granada), la última en incorporarse a la lista de filiales, será la encargada de abrir este desfile ante las puertas del Santuario de la Virgen del Rocío.
Allí espera 'Ella' que desde hace dos semanas se encuentra entronizada en su paso procesional ataviada con el traje y el manto conocido como de los Apóstoles, o de las hermandades, al que acompañan flores en tonos blancos y amarillos, en recuerdo y homenaje al Santo Juan Pablo II, recientemente canonizado y quien fuera el Papa que visitara el Santuario del Rocío, en junio de 1993.
Hasta ese momento, otros lugares emblemáticos como Bajo Guía, el Vado del Quema o el puente del Ajolí volverán a ponerse al servicio de los romeros, de una devoción y de un ansío, el de recorrer la distancia que, desde sus municipios de origen, los separa de su imagen venerada y poder estar, un año más, junto a 'Ella'.
