Tres funcionarios del centro penitenciario de Huelva, entre ellos un jefe de servicio, han resultado heridos en un grave altercado protagonizado por dos reclusos, según ha informado en una nota de prensa la Agrupación de Cuerpos de la Administración de Instituciones Penitenciarias (Acaip).
De este modo, han indicado que el incidente tuvo lugar este martes en el módulo tres del centro en el reparto del desayuno ya que dos internos, de nacionalidad española, protagonizaron "un intento de motín, incitando al resto de internos del módulo a levantarse y atentar contra los funcionarios de vigilancia".
Han destacado que "los hechos protagonizados por ambos internos han sido de extrema gravedad, habiendo sido golpeados, contusionados y atendidos en el Departamento de Enfermería un total de dos funcionarios, y un jefe de servicio con heridas de distinta consideración, con puñetazos en la cara, patadas y un dedo fracturado por parte de uno de los funcionarios, a consecuencia de estos graves incidentes".
Así las cosas, desde Acaip remarcan que "ha sido tal el nivel de tensión y violencia que han tenido que ser aislados, además de los dos internos instigadores, otros seis internos más en el Módulo de Aislamiento por las graves proporciones que estos hechos han alcanzado".
Además, han añadido que "los internos instigadores de estos incidentes tienen antecedentes de primer grado, con un elevado número de partes, y una manifiesta inadaptación al régimen de vida ordinaria, y cumplen condena por delitos contra las personas y/o la propiedad". Asimismo, consideran que "ambos responden al perfil de internos con graves problemas de adicciones a sustancias psicotrópicas, lo cual contribuye a desinhibir y dar rienda suelta, en muchos casos, a conductas de extrema violencia".
Desde la Agrupación de Cuerpos de la Administración de Instituciones Penitenciarias (Acaip), --sindicato mayoritario en Instituciones Penitenciarias y en el centro penitenciario de Huelva--, han alertado de "la concentración de internos de perfiles de extrema peligrosidad que han protagonizado incidentes regimentales graves y que no tienen cabida en otras prisiones y que literalmente 'se los quitan de encima' con destino al centro penitenciario de Huelva".
Del mismo modo, han manifestado su "honda preocupación" por hechos como éste y han destacado "el elevado nivel de profesionalidad" de la plantilla que, a pesar de haber visto "reducido su número de efectivos por traslados o 'puestos a medida', sigue sacando adelante el trabajo".
Por ello, han subrayado que este martes "la rápida y eficaz intervención de los funcionarios de vigilancia y al jefe de servicio no hay que lamentar consecuencias peores en el centro penitenciario onubense". Para este sindicato, "la sensación de soledad de los trabajadores penitenciarios resulta apabullante y vergonzosa, habiéndose creado un ambiente laboral donde lo habitual es mirar para otro lado ante los problemas cotidianos, en lugar de abordarlos y tratar de buscar soluciones".
En definitiva, han trasladado a la opinión pública y a la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias "su malestar y repulsa por la nefasta e incompetente" gestión del director del centro penitenciario de Huelva, Alejandro Zulueta, que "con sus dudas y contemplaciones está provocando un ambiente de desmotivación e impunidad alarmantes".
Desde Acaip han solicitado la intervención del secretario general de Instituciones Penitenciarias, Ángel Yuste, a fin de encauzar y tratar de dar solución a los problemas que "aquejan a este centro penitenciario de Huelva y que desde la actual dirección no se es capaz de dar solución".
RESPUESTA DEL DIRECTOR
Por su parte, a preguntas de los periodistas sobre este incidente en una rueda de prensa este miércoles, el director de la prisión de Huelva, Alejandro Zulueta, ha confirmado que este martes se produjo "un incidente grave a primera hora de la mañana, que se solventó con el aislamiento de los dos reclusos que lo motivaron".
Al respecto, ha asegurado que "la normalidad ha vuelto al centro y que está controlada la situación". Por último, ha precisado que en una prisión con 1.350 reclusos, "en los módulos más conflictivos puede darse alguna situación violenta, que se resuelve".
