Una investigadora de la Universidad de Huelva, Marta de la Vega, ha desarrollado un estudio que le ha permitido descubrir una nueva estirpe de microalga marina autóctona en las marismas del río Odiel, que por sus características es candidata a ser usada para biodiésel y suplementos vitamínicos.
La investigación se ha desarrollado en el marco de su tesis doctoral, denominada "Aislamiento, caracterización y manipulación genética de microalgas marinas para la producción de compuestos de alto valor añadido".
La nueva especie, según explica su autora en el estudio, al que ha tenido acceso Efe, pertenece al género Picochlorum, es capaz de llegar a una alta tasa de crecimiento y sobrevivir a condiciones adversas.
Además, explica que "las características de su perfil lipídico la hace una prometedora candidata para la producción de biodiésel, igual que su alto contenido en los carotenoides luteína y zeaxantina indican que la microalga podría ser una buena fuente natural de suplementos vitamínicos oculares".
Una vez descubierta la nueva especie y, consciente de que para que una producción de biodiésel basada en el cultivo de esta microalga sea económicamente factible, su contenido en lípidos debe ser incrementado, procedió a optimizar el método de cultivo de la microalga para mejorar el contenido en lípidos neutros.
Las conclusiones la llevan a afirmar que la optimización del modo de operación, del contenido inicial de nutrientes y del diámetro del bioreactor permitió incrementar hasta cuatro veces la biomasa final alcanzada en cultivos de Picochlorum sp HMÍ.
Asimismo, indica que con un método de cultivo en dos fases se podría conseguir valores en lípidos hasta 10 veces mayores que en el cultivo control.
