Había que jugarlo porque así lo manda la competición, pero el partido de este domingo es de esos que a nadie gusta jugar y que a pocos aficionados (por no decir ninguno gusta ver). Recre y Barça B se despidieron de la Segunda División en el Nuevo Colombino con un partido sin tensión, con pocos aspectos reseñables, con la soga de la clasificación ya bien sujeta y en el que, al menos, el Decano pudo despedirse de la categoría con un triunfo estéril con el que salvar algo de la honra que ha ido perdiendo a lo largo de los 42 partidos de esta tortuosa temporada.
Dos goles y poco más
El partido, carente de intensidad desde el pitido inicial, comenzó con un Recre más concentrado que su rival. Muchos espacios para la construcción, poca presión en la elaboración y acercamientos del equipo albiazul, con un juego algo más alegre y llevando más peligro que el filial blaugrana.
Pese a ello, hubo opciones de los dos para ponerse por delante. Cabrera la tuvo para el Recre, pero Ortolá le tapó bien. Poco después, en el minuto 18 fue Hernán Menosse el que cabeceó un poco por encima del larguero una falta botada por Manu Molina, y Álvaro Antón lo intentó con un disparo que se envenenó tras un rechace y se fue a córner.
El Decano ofrecía algo más de motivación, y fruto de esa actitud abrió la lata. 1-0. Minuto 25. Una de las mejores jugadas colectivas de la temporada apareció cuando ya para nada servía. El grueso de la acción se la curraron entre Cabrera y Juanan. El interior uruguayo prolonga para el este domingo lateral izquierdo, que pone un buen centro al segundo palo donde Núñez conecta de volea con la derecha y la manda adentro.
Diez minutos después, llegó la sentencia. 2-0. Minuto 35. Enésima pérdida de balón en la salida desde atrás del Barcelona B. En esta ocasión, Jesús Vázquez logra robar el balón cerca del área a Ventura, avanzó con fe hacia la portería blaugrana y fue al suelo para conectar con la izquierda el último gol de la temporada albiazul.
Si ya la cosa era poco intensa, la segunda parte fueron 45 minutos de la basura. El Barça B intentó por inercia recortar la desventaja en el marcador, y el Recreativo ya no ofrecía el cierto ritmo de la primera mitad.
El partido fue pasando, y fue la afición, la que dio un poco de salsa al tiempo que quedaba para que acabara el choque. Así, un sector de la grada, poblada por 3.049 sufridores albiazules, aprovechó que ya en el campo la emoción se había acabado hace mucho, para pedir la dimisión de Pablo Comas y la directiva, y para ironizar sobre la gran temporada que se ha marcado Braulio, para el que pidieron su convocatoria para la selección.
En fin, adiós con derrota para salvar la honra y empezar a pensar en la planificación de la próxima campaña, esperemos que en Segunda B, aunque haya algunos que todavía trasladan que el Recre jugará el partido de los despachos para tratar de quedarse en Segunda. En fin...