La empresa adjudicataria del 90% de las acciones del Recreativo de Huelva, Zephir Homes SLU, ya conoce la cuantía exacta del desembolso al que debe hacer frente en las próximas semanas si quiere formalizar la compra de la entidad decana.
Lejos quedan esos 650.000 euros que pedía el Ayuntamiento de Huelva en el pliego de condiciones para ponerse al día con la AFE y el convenio de acreedores. Zephir, cuya cabeza visible es el expresidente albiazul Francisco Mendoza, sabe que hay que abonar, además, 603.000 euros a la Real Federación Andaluza de Fútbol (RFAF) antes del 30 de junio. Aunque, según ha podido saber Viva Huelva, la RFAF estaría dispuesta a percibir 500.000 euros de forma inmediata e incluso condonar 103.000 euros.
Así que Francisco Mendoza y sus socios buscan una nueva inyección económica para invertir en el Recreativo, ya que se han encontrado con una serie de escollos que desconocían.
Por el momento, desde el consejo de administración del Recreativo de Huelva están trabajando a contrarreloj para facilitar toda la documentación del club a los letrados de Zephir Homes. Además, en la mañana de este martes, uno de los rectores recreativistas acudió a la Seguridad Social para solicitar el aplazamiento de una deuda de 840.000 euros correspondiente a un pago no efectuado en relación a un exjugador del Decano en la etapa de Pablo Comas al frente de la gestión del club.
Por otro lado, el Ayuntamiento de Huelva, la otra pieza de este puzzle por ser el todavía propietario de la entidad, debe resolver con la mercantil Eurosamop la rescisión del contrato de gestión hasta 2027 del Recreativo. Ya esta empresa dejó entrever en un comunicado estos días atrás que estaría dispuesto a marcharse del club si se le abona el millón y medio invertido en el club el pasado verano, por lo que no haría efectiva la famosa cláusula de los quince millones de euros para irse.
En definitiva, días agónicos para el recreativismo y la ciudadanía onubense. El martes 26 está prevista la firma ante notario de la compra-venta de las acciones y todo está todavía por resolver.
