El tiempo en: Ayamonte
Jueves 14/11/2024
 
Publicidad Ai
Publicidad Ai

Huelva

"Si llegamos al Mundial, que sea con opción de conseguir otro oro"

Carolina Marín confiesa que se está preparando tanto mental como físicamente para ser "una jugadora totalmente diferente" en su regreso a las pistas

Publicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai
  • Carolina Marín. -

La competitividad es una de las características que mejor define a la jugadora de bádminton Carolina Marín (Huelva, 1993). Lesionada de gravedad, se ha visto obligada a frenar. Pero solo por el momento. Sin prisa pero sin pausa, la vigente campeona olímpica trabaja cada día para volver a las pistas, incentivada por el estímulo de seguir ganando. EFE habló con ella en exclusiva en la 'Universidad Alfonso X el Sabio', donde cursará a partir del curso 2019-2020 el Ciclo Formativo de Grado Superior en Dietética.

-Lo primero. ¿Cómo se encuentra?

-Me encuentro bastante contenta dentro de lo malo que es estar parada por una lesión. Contenta sobre todo por cómo llevo la recuperación. Hoy, ha sido la sexta semana desde que me operaron y todo va bastante rápido dentro de lo que es esta lesión, que es bastante lenta y lleva muchos meses.

-¿Y en lo anímico? ¿Por qué fases ha pasado desde que cayó lesionada?

-Cuando caí lesionada lo pasé muy mal. No me esperaba lo peor, no esperaba pasar por quirófano ni que nada estuviera roto. Cuando llegué a España el doctor me lo dijo y fue como un jarro de agua encima. En el primer momento, lo pasé mal porque sabía lo que era pasar por quirófano, que eran muchos meses sin competir. Sabía que dentro de lo competitiva que soy me iba a costar. He desarrollado esa paciencia que no tengo. En otros aspectos estoy sacando cosas positivas.

-Para una deportista que siempre se ha caracterizado por su fortaleza mental imagino que esta es una de las pruebas más duras que ha tenido que superar ¿no?

-Efectivamente, sobre todo por el hecho de estar parada sin competir. Y también por no venirme abajo. Desde el minuto uno en que supe que tuve el cruzado roto empecé a llorar y, en cuanto salí del hospital, me dije que esto es lo que había, que me tocaba parar porque creo que mi cuerpo también lo necesitaba. Hay que sacar cosas positivas. Ahora, toca mejorar esos mínimos detalles que nunca hemos tenido tiempo de mejorar.

-¿Se puede decir que vamos a ver a una Carolina mejor después de la lesión?

-Eso espero. Me estoy preparando muy bien tanto mentalmente como físicamente para que, el día que vuelva, se vea a una jugadora totalmente diferente.

-¿Qué siente cuando ve a sus rivales en la pista y sabe que usted no puede estar?

-Lo primero que siento sobre todo es rabia. La semana pasada por ejemplo fue el All England, que para mí era uno de los principales objetivos de este año. Llegaba en muy buenas condiciones, me estaba encontrando con mucha confianza, se estaba viendo que los resultados estaban siendo muy buenos. Pero a la vez estoy aprendiendo un poco de cómo se está desarrollando ahora mismo el juego sin que yo esté.

-¿Desde fuera, tranquilamente en casa, se ve el bádminton distinto? ¿Aprecia cosas en sus rivales que no detectaba antes?

-Antes también las analizábamos muy bien pero quizás ahora las analice desde otra perspectiva, desde la perspectiva de que no estoy compitiendo. No tengo que estar súper atenta a esos mínimos detalles que hay ahora mismo en el juego de cada una. Se vive de diferente forma, una incluso lo disfruta más ahora mismo que no está metida en la competición.

-Ha recibido muchísimas muestras de ánimo de gente de todos los ámbitos. ¿Qué le dice eso? ¿Lo siente como una victoria?

-Estoy inmensamente agradecida a cada una de las personas que desde el minuto cero que vieron mi caída en Indonesia me han mandado muestras de apoyo y de mucho cariño. Eso me llena de energía y me da ese pequeño empujón cuando hay días complicados en la pista.

-¿Cuando volveremos a verla en la pista? ¿En el Mundial de Basilea quizás?

-¿Por qué no?. La verdad es que no me marco un tiempo o una fecha para volver. Lo primero que dije a mi entrenador es que quería volver cuando me encontrara al doscientos por cien segura, cuando supiera que esa rodilla iba a estar en las perfectas condiciones que estaba la otra. Si llegamos al Mundial será una buena noticia pero no quiero llegar para ver qué tal estoy, quiero llegar con opción de conseguir otra medalla de oro. Si no llegamos, prepararemos el siguiente torneo. No tenemos ninguna prisa. El principal objetivo son los Juegos Olímpicos de Tokio.

-¿Es una buena meta a nivel mental pensar que ese puede ser un buen lugar para volver?

-Sí. Pero a la vez es un tipo de presión y yo, ahora mismo, lo que menos quiero es generarme ciertas presiones porque eso puede suponer a la vez cierta lentitud en mi recuperación. No quiero agobios, ningún tipo de presión. No me marco llegar al Mundial. Si llegamos bien y si no, al siguiente torneo.

-¿Renovar el oro de Rio en Tokio es el gran reto que tiene ahora mismo?

-El Mundial no es lo principal que tenemos ahora, son los Juegos Olímpicos de Tokio. Ahí llegaremos de la mejor forma posible, sin ninguna duda.

-¿Por qué se ha decidido a estudiar dietética y no otra cosa?

-Más que nada porque en mi deporte y en cualquiera tienes que cuidar mucho la alimentación. Creo que puedo ayudar en un futuro a las demás personas y ahora en el presente a mi misma. 

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN