La Universidad de Jaén ha celebrado este martes la apertura oficial del curso académico en medio de protestas de varios colectivos por las medidas de las administraciones que "van a cargarse" la educación pública superior.
Al grito de "la Universidad no se vende" o "Manos arriba, esto es un atraco" un grupo de en torno a 60 personas tanto del sindicato CCOO como investigadores que denuncian el peligro que corre su trabajo se han concentrado ante el Aula Magna a la espera de la comitiva académica que cerraban el rector, Manuel Parras Rosa, y la directora general de Investigación, Tecnología y Empresa de la Junta de Andalucía, Eva María Vázquez. Tanto ellos, como instantes antes el alcalde de Jaén, José Enrique Fernández de Moya (PP), han sido los blancos de las pitadas más sonoras.
Tras la entrada de la comitiva en el edificio, también lo ha hecho un grupo de las personas que estaban protestando, fundamentalmente del sindicato, con el objetivo de asistir también al acto de apertura. Entonces, al negarle el personal de seguridad la entrada al salón donde estaba comenzando la inauguración, se han vivido los momentos de mayor tensión, aunque al final y a pesar de que han permanecido en la puerta durante un rato intentando pasar la situación no ha llegado a mayores. Sí lograron entrar algunos por otros accesos al gallinero del Aula Magna, donde desplegaron la pancarta con el lema 'La universidad pública no se vende, se defiende'.
"Protestamos porque se están cargando la universidad y nos tienen asfixiados económicamente todas las administraciones", había criticado poco antes a los periodistas el responsable de Universidad de CCOO-Jaén, Eduardo Domínguez, quien ha solicitado un plan de tesorería que permita funcionar día a día, ya que la UJA "ha venido ahorrando a base de esfuerzos de toda la comunidad universitaria y ese ahorro ya se ha gastado".
A su juicio, las líneas rojas --plantilla, proveedores e investigación-- que el propio rector marcó en su comparecencia de este lunes al advertir de la situación "insostenible" de la institución, son "las mínimas que deben mantenerse para medianamente funcionar", que "no para que esto sea lo que debe". En este sentido, ha "aplaudido abiertamente" la postura de Parras con respecto a los proveedores porque no se puede contribuir a romper el tejido social de la provincial, así como el hecho de que "no se puede dejar de pagar a los trabajadores", aunque sobre la investigación ha dicho que "no vale con que solo lo diga, lo tiene que demostrar".
En cualquier caso e "independientemente de que esté actuando medianamente bien", Domínguez se ha referido al gobierno de la propia UJA para recordarle que "hay otras formas de actuar sin tener que entrar en despidos o ciertas cuestiones en las que están entrando sin necesidad". "Se están despidiendo a personas, no renovando contratos, se están cargando la investigación, se amenaza entre comillas con no renovar a partir de final de año si no se reciben fondos de la Junta los proyectos de investigación y las personas ligadas a ellos. En definitiva, están cargándose el servicio público que presta la universidad y no podemos consentirlo", ha aseverado.
"A LA CALLE"
Junto a los miembros del sindicato también ha expresado su malestar investigadores que ven en peligro su futuro. En concreto, hay 118 a los que previsiblemente en diciembre no se les va a renovar el contrato que firmaron con proyectos de la Junta de Andalucía, con financiación desde 2009 "que lleva sin ingresar a la universidad ningún fondo durante ese tiempo, desde ese año hasta ahora", según ha explicado uno de los afectados, Francisco Hernández Torres.
"Muchos somos doctores, otros son predoctorales... pero todos hemos pasado unos criterios de selección para poder optar a nuestro contrato. Hemos firmado y la Junta de Andalucía al no pagar ha forzado a la Universidad de Jaén a echarnos a la calle a partir de diciembre a 118 personas", ha lamentado.
Otras 40 están afectadas por los cambios en la promoción de ayudante doctor a contratado doctor: "La promoción natural hasta ahora era pasarnos de ayudante doctor cuando cumplían nuestros contratos; salían las nuestras plazas, a concurso eso sí, pasábamos a contratado doctor. Pero ahora no se nos permite y conforme vayan a ir cumpliendo nuestros contratos no se nos permite la promoción y vamos a la calle", ha comentado una de ellas, Raquel Jiménez Melero, ayudante doctora del Departamento de Biología Animal Vegetal y Ecología.
"DIÁSPORA"
En este caso, también ha recordado el importante gasto público para acabar, "los que tengan más suerte", en el extranjero, "a que el resto de los países se beneficien del dinero invertido" en ellos, además de suponer "otro puntito más" para que la calidad de la enseñanza en las universidades "quede más mermada". "Lo único que pedimos es que se nos dé una solución, después de tanto como se nos ha exigido de calidad, de excelencia. Es una carrera de fondo, muchos años luchando, investigando y formando buenos docentes y ahora nos echan a la calle", ha agregado.
Esta cuestión era, precisamente, uno de los ejes del discurso del rector de la Universidad jiennense, tal y como el propio Parras anunció este lunes al hablar de lo que ha denominado "diáspora del conocimiento". "Es lamentable cómo formamos talento y somos incapaces en este países de sentar la bases de ese talento, por lo que esto es un fracaso colectivo de España como país", criticó para constatar que se está "descapitalizando" el país por la vía del talento en beneficio de otros que no han invertido en la educación. Y es que, según apuntó, la crisis económica ha dejado al descubierto que los "gobernantes no están apostando por las universidades"