Esta película fue escogida por Jordania para representar al país en la carrera por el Oscar a Mejor Película de Habla no Inglesa 2009. Escrita y dirigida por el joven director Amin Matalqa, el realizador jordano ha paseado su primer largometraje por los festivales de medio mundo, obteniendo una gran cantidad de premios en todos ellos. A pesar de ser debutante en un país que está creciendo cinematográficamente, su difusión internacional ha sido considerable.
La historia nos cuenta la vida de Abu Raed, un miembro del equipo de limpieza del Aeropuerto de Amman. Un buen día un niño le ve con una gorra puesta y piensa que es piloto de verdad. Al día siguiente el niño y un grupo de amigos inquietos le preguntan por sus viajes por todo el mundo y Raed decide hacerles felices inventándose todo tipo de historias que él había creado leyendo libros y en conversaciones con viajeros.
Fue la primera película de Jordania exportada al mercado internacional. Consiguió el Premio del Público a la mejor película extranjera en el Festival de Sundance, en 2008. Además de unas localizaciones llenas de simbolismo, destaca su retrato de personas cotidianas y su capacidad para traspasar las fronteras sociales entre ricos y pobres.