Se vuelven a plantear, asegura el diputado, una serie de asuntos que, si bien son temas que afectan a las dos comunidades a ambos lados de la verja, dejan de lado otros muchos que verdaderamente son los que mantienen la actual tensión que se vive en las relaciones entre España y el Gobierno de Gibraltar.
Mientras que el debate sobre la titularidad de las aguas que rodean la colonia queda excluida de cualquier reunión, técnica o interministerial, las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado se ven obligadas a acatar las directrices de Madrid, que pretenden evitar cualquier enfrentamiento con las autoridades de Gibraltar, a costa de la credibilidad y la dignidad de un cuerpo como la Guardia Civil, que es quien sufre las presiones directas de las embarcaciones de la Royal Navy cuando se encuentran realizando su trabajo. De todos son conocidos los enfrentamientos que se han producido en estas aguas entre la armada británica y el instituto armado, que siempre se saldan con la retirada de la benemérita de unas aguas sobre las que España tiene toda la responsabilidad.
Hace escasas fechas el propio ministro principal de la roca, Peter Caruana, ha asegurado que si los asuntos de soberanía no se han planteado en las reuniones del Foro ha sido porque ninguna de las partes lo ha puesto sobre la mesa. Se trata de un foro abierto a cualquier propuesta, dijo el mandatario gibraltareño, y, por lo tanto, cualquiera de las tres administraciones, española, británica o gibraltareña podría incluirlo en la agenda de las reuniones técnicas o interministeriales.
Pues bien, concluye Landaluce, quizá haya llegado el momento en que España deje a un lado su postura sumisa a la hora de plantear los asuntos que van a ser tratados en el Foro de Diálogo y exigir que comiencen las conversaciones que den por finalizado un litigio que nunca tuvo que plantearse como es la indiscutible titularidad de las aguas españolas que rodean la roca como paso previo para dar cabida al inicio de un debate entre España y Reino Unido sobre la soberanía del territorio que ocupa la colonia británica.