Uno de los nombres propios del Festival de Jerez es Joaquín Grilo. Sus espectáculos son tan esperados como los que más y no hay vez que deje indiferente al público que lo sigue desde hace más de 30 años. Este bailaor jerezano dio sus primeros pasos en el propio barrio de Santiago, tomando sus primeras clases con Cristóbal El Jerezano e incorporándose luego al Ballet Albarizuela de Fernando Belmonte, maestro al que por cierto están tratando de poner en el lugar que corresponde tras su doloroso fallecimiento hace unos meses.
El 27 de febrero volverá a su Teatro Villamarta para estrenar ‘Cucharón y paso atrás’, espectáculo en el “quiere evocar el duro trabajo en el campo, la difícil labor del minero, la intensa actividad de forjar el hierro en la fragua, la penosa ocupación de los jornaleros que de sol a sol y durante meses interminables hacían su vida en los cortijos”, en palabras del musicólogo y parte del guion y dirección de escena de la propuesta Faustino Núñez.
Joaquín, que ha compartido a lo largo de su dilatada carrera escenarios con Paco de Lucía, Lola Flores, Vicente Amigo o Chano Domínguez, recorre en este montaje una parte de la historia en la que los maestros de este arte“forjaron un repertorio de cantes, toques y bailes inspirados en esos trabajos, cantes de labor, cantes mineros, los llamados de fragua, y poniendo de manifiesto la natural evolución del flamenco desde el origen hasta la actualidad, una suerte de retrospectiva que nos ayuda a proyectar en el presente todo lo heredado por los maestros del pasado”, apunta Faustino.
El bailaor ya apuntó en su paso por el programa Alianda, de 7tv, que “me he criado con el Festival y en este espectáculo voy a retomar un registro diferente pero no por nuevo, sino por retomar el de aquellos años atrás, ese registro de entonces que algunos desconocen”. En la obra contará con la colaboración especial del cante de Carmen Grilo y José Valencia, así como con las guitarras de Francis Gómez y José Tomás.
OTRAS PROPUESTAS A DESTACAR
La semana del Día de Andalucía, la primera de las dos en las que se celebra el Festival de Jerez, tendrá grandes espectáculos tanto de baile como de cante y guitarra, además de otras actividades que dan sentido esa “hora del vermut” que este año se ha instalado para dotar de contenido el horario del medio día. Así, además del esperado estreno del Grilo, el lunes 26 habría que destacar la presencia de Sara Jiménez en los Museos de la Atalaya, uno de los principales espacios de esta edición. Al día siguiente, después de que Joaquín actúe en Villamarta, a las once de la noche el cante de Luis Moneo se adueñará de Los Apóstoles de González Byass, presentando su ‘Metal Fundío’ junto a la guitarra de Juan Manuel Moneo.
El 28 de febrero, día de la comunidad, la jerezana Ana Crismán estará a la una de la tarde en La Atalaya (salón Don Jorge) con Arpaora con la colaboración de Jesús Méndez y Marta de Troya, y el ciclo De Peña en Peña contará con Juan El Moreno en la Peña La Bulería, organizado por Los Cernícalos. El día 29, Juan Diego Mateos estará con Una promesa, su nuevo disco, en Sala Compañía a las seis y media de la tarde, y Ana Morales ocupará la escena en el Villamarta a las ocho y media.
Mercedes de Córdoba, Rafael Riqueni, Alfonso Losa, Patricia Guerrero, Farruquito, El Pele… serán los protagonistas de los posteriores días en los distintos escenarios del certamen.
