El presidente del Consorcio de Aguas de la Zona Gaditana (CAZG), Andrés Díaz, ha insistido en la inaplazable necesidad de incrementar el precio del agua en alta “para garantizar” la prestación del servicio y dado que con anterioridad “no se han hecho los deberes”, ya que a su juicio en estos últimos ejercicios deberían haberse aprobado pequeñas subidas.
Conrado Rodríguez, del PSOE, apuesta por el contrario por dejar sobre la mesa lo que denomina “tarifazo” dado que en el presente ejercicio no será posible acometer las inversiones que se requiere en las infraestructuras hidráulicas al no haberse redactado siquiera los proyectos necesarios para ello.
Díaz y Rodríguez participaron ayer en el programa ‘Siente Cádiz’, que se emite semanalmente en 7 TV y que abundó en el debate suscitado tras la decisión de la asamblea del Consorcio de incrementar el precio del agua en alta, que pasa de 0,15 a 0,316 euros, una propuesta que hace algunas semanas apoyaron los ayuntamientos gobernados por el PP y AxSí.
El presidente del Consorcio incidió en los argumentos ya esgrimidos con anterioridad, reconociendo que “a ningún político le gusta subir impuestos ni tasas” pero advirtiendo al mismo tiempo de que es “imprescindible” incrementar el precio del agua al menos “para cubrir los gastos” que se están generando y poder plantear al menos el mantenimiento de unas infraestructuras hidráulicas que “en el 75 por ciento” de los casos están ya amortizadas.
Además de advertir de la imposibilidad de acometer esas actuaciones de manera inmediata, Conrado Rodríguez advirtió de que “quien tiene capacidad” para hacer frente al desembolso que precisa la mejora de las infraestructuras es la Junta de Andalucía, que sin embargo “baja los impuestos a los ricos” y se queda por tanto “sin financiación” para atender estas necesidades.
Rodríguez acusó a Díaz de estar haciendo por tanto el “trabajo sucio” al Gobierno autonómico “subiendo tributos dirigidos a todos los ciudadanos con independencia de su capacidad adquisitiva”, algo que el presidente del Consorcio negó, insistiendo en la idea de que su obligación es “actuar” y no “mirar para otro lado”, que es lo que cree que hicieron “los gobiernos anteriores”.
El representante socialista entiende a pesar de todo que la subida del precio del agua en alta es “totalmente innecesaria por desorbitada” y abogó por poner sobre la mesa un plan de inversiones que justifique el incremento de la tarifa, ya que al no ser así cree que se está poniendo de manifiesto que únicamente tiene un “afán recaudatorio”.