El vicepresidente de
Comunidad de Regantes de Guadalcacín, José Miguel López, ha pedido a la
Junta de Andalucía que "reconsidere" los porcentajes de restricciones de agua actuales en la provincia de Cádiz y traten de encontrar "un equilibrio" entre la agricultura, el abastecimiento doméstico, la industria y el turismo tras las lluvias registradas durante esta pasada Semana Santa.
En declaraciones a los medios ha señalado
estas precipitaciones han servido para "paliar en parte la problemática existente" con respecto a la culminación de los cultivos de la campaña de otoño-invierno y que se ha pasado "de escasez grave a escasez severa".
En ese sentido
López ha trasladado "la preocupación" de los regantes de esta zona de la provincia gaditana por el planteamiento que vaya a trasladar el comité de gestión de la sequía sobre el porcentaje de la dotación que van a tener para planificar la siguiente campaña, la de primavera y verano, un porcentaje que actualmente se encuentra al 25 por ciento.
Así, ha señalado que los indicadores utilizados por el organismo de la Cuenca del Guadalete-Barbate, "marcan claramente" que se ha salido de la escasez grave y se ha pasado a "escasez severa", una situación que para los regantes gaditanos ha servido para pedir a la administración andaluza que "reconsidere" las restricciones de agua interpuestas debido a la sequía.
"La agricultura y la ganadería es el sector encargado de alimentar a la población y, en cuanto a uso de agua, deberíamos de estar por encima de otros sectores económicos, como pueden ser el turismo en cuanto a preferencia de uso", ha manifestado el vicepresidente de Comunidad de Regantes de Guadalcacín.
Tras las últimas precipitaciones, los embalses de la provincia de Cádiz se encuentran al 28,9% de su capacidad, algo más de 100 hectómetros cúbicos (hm3) de agua que hace una semana, al contar ya con 524,27 hm3. El embalse de Guadalcacín, el más grande de la provincia, se mantiene por debajo del 20%, ganando 17 hm3 esta semana, aunque se espera que gane más agua una vez que el pantano de los Hurones haya desembalsado agua al estar al 92% de capacidad, ya que ésta suele acabar en el de Guadalcacín.