El Estrecho de Gibraltar es un lugar idóneo para el estudio de la migración de muchos grupos de animales, funcionando como "puerta de enlace" para muchas especies de aves migratorias. De esta manera, ha explicado que año tras año, son "casi 100.000 las aves" que se contabilizan entrando en la Península desde los dos observatorios desde los que se sigue sistemáticamente esta migración, en concreto, en los centros gaditanos de Cazalla (Tarifa) y Punta Carnero.
En este sentido, ha añadido que las migraciones más abundantes son las poblaciones de milanos, cigüeñas blancas, águilas calzadas y águilas culebreras. El estudio de esta migración prenupcial ofrece una información "muy valiosa" que complementa los resultados que se obtienen cada año con el seguimiento de la migración otoñal o postnupcial. A través del análisis de esta información se amplía el conocimiento que se tiene de estos grupos de aves y se contribuye a mejorar su estado de conservación.
En relación al Chorlitejo Patinegro (Charadrius alexandrinus), ha apuntado que, aunque parte de la población de éste está presente en las costas gaditanas durante todo el año, otras muchas parejas de esta especie regresarán a partir de marzo en esta migración a Tarifa, al Paraje Natural Playa de los Lances, para iniciar su reproducción. En esta línea, ha añadido que es un ave limícola de pequeño tamaño catalogada por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) con información "insuficiente", y como "vulnerable" en el Libro Rojo de Vertebrados Amenazados de Andalucía.
Asimismo, ha indicado que, presente en todo el litoral español, en la comarca del Estrecho de Gibraltar crían "unas 100 o 120 parejas, aunque pasan el invierno en la zona más de 500 individuos". Del mismo modo, ha explicado que, típica de humedales costeros, se encuentran en el Paraje Natural Playa de los Lances, aunque esta situación se ve condicionada por "el uso indebido que se viene realizando de dicho paraje en los últimos años".
En esta línea, ha resaltado que "la inadecuada utilización de esta zona de especial protección por parte de las personas que la visitan, haciendo caso omiso de las indicaciones y señales existentes en la zona, supone una molestia constante para los cientos de aves que utilizan el paraje para su alimentación y descanso, actividades fundamentales para que puedan completar sus rutas migratorias".
Durante el fin de semana pasado, la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía presentó el censo de medio millón de aves planeadoras a su paso por el Estrecho de Gibraltar durante 2010, a través de el Programa Migres 2010 que recoge los movimientos de dichas aves.