Quirós demostró su dotes de pegador y su sensacional primera vuelta le sirvió para recibir todo tipo de elogios al liderar la competición con 65 golpes.
El sanroqueño mostró así su potencial en este selecto club, donde los logros se amplifican a escala mundial.
Su participación comenzó con un espectacular -7 (65 golpes), que le aupó a lo más alto de la tabla. Sin embargo sus prestaciones cayeron al día siguiente con un +1 (73 impactos). Aún así, su tarjeta fue suficiente como para pasar el corte por primera vez en tres participaciones.
En el tercer recorrido las opciones al triunfo final del guadiareño se disiparon con un +3 (75 golpes). En la última jornada, Quirós firmó de nuevo una tarjeta de +2 (73 impactos), que se tradujeron en un -1 al final del torneo.
Quirós acaba así por debajo del par en Augusta, un buen resultado que refuerza la confianza en su juego y le sirvió para situarse entre los 30 primeros del torneo.
Además, el sanroqueño fue extensamente seguido por la prensa española, que desde el primer día apostó por el como la opción nacional al triunfo final. Una victoria que fue a parar a manos del sudafricano Schwartzel, tras el clamoroso hundimiento en la última jornada de McIlroy.