El patronato de la Fundación Andrés de Ribera (FAR) acordó este jueves el inicio de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) para sus trabajadores, si bien tanto Ayuntamiento como Diputación -los dos patronos de la entidad cultural- asumen el compromiso de promover la subrogación o contratación de la plantilla por parte de las empresas que asuman la “gestión indirecta” de los espacios que integran el complejo museístico de La Atalaya.
De entrada, el patronato acordó la continuidad de la FAR, después de que en la anterior legislatura se apostara por su disolución, lo que ha provocado que la entidad quede en estos últimos meses en una suerte de limbo legal. Además, será el presidente de la Diputación Provincial, José Loaiza, quien presida también la junta del patronato.
Tanto Loaiza como la propia alcaldesa, María José García-Pelayo, expresaron su “compromiso” en el mantenimiento de una entidad históricamente asolada por las deudas y por los enfrentamientos políticos.
Esta nueva etapa parte de la elaboración de un Plan de Viabilidad, que entre otras cosas determinará qué recursos son susceptibles de esa “gestión indirecta”, partiendo de la base de que la FAR tiene como principales activos al Museo de los Relojes, la sala multimedia que suele ser utilizada para la celebración de todo tipo de eventos y un casco bodeguero empleado también para distintas actividades vinculadas al ocio y la restauración. La plantilla de la FAR está actualmente integrada por apenas una docena de trabajadores, algunos de ellos en edad próxima a la jubilación.
Mamen Sánchez critica que se recurra al despido
La diputada socialista Mamen Sánchez -trabajadora en excedencia de la FAR- lamenta que el Ayuntamiento apueste por el despido de trabajadores amparándose en la reforma laboral en lugar de “aplicar la flexibilidad interna, en unos momentos en los que resulta muy difícil encontrar un nuevo puesto de trabajo”.
Sánchez trasladó su apoyo a los trabajadores que van a ser incluidos en el ERE municipal, así como a aquellos de Onda Jerez que también van a perder sus empleos. La diputada cree que las políticas de empleo que Jerez necesita “deben ser abordadas de forma eficiente, a través del dialogo social y político”. “La situación de la ciudad no se soluciona con despidos y recortes y sin ninguna alternativa, idea o propuesta para retornar al crecimiento”.
