El futuro del Ayuntamiento de Jerez sigue todavía en el aire a apenas 48 horas de la sesión de investidura y con Ganemos -que es la formación que tiene ahora la llave de la gobernabilidad- arremetiendo contra quienes aspiran a favorecer su entrada en el Gobierno local. El candidato a la Alcaldía de la agrupación de electores, Santiago Sánchez, consideró ayer “determinante” en todo este proceso la “división interna” que a su juicio existe en el seno del PSOE-A, dando además por hecho que la secretaria general, Susana Díaz, y la candidata a la Alcaldía, Mamen Sánchez, no reman en una misma dirección.
“Dentro del PSOE está la línea de Mamen y la de Susana, y creemos que eso va a ser determinante a la hora de que se dejen apoyar por nosotros. Esa división interna, que es muy potente, va a ser determinante para decidir el futuro de la ciudad. Lo que pedimos es que se aclaren entre ellos, porque hay gente del PSOE que quiere que Mamen sea alcaldesa y gente que no; y Sevilla casi seguro que no quiere”, sostuvo.
A Ganemos le “encantaría” que esas dos supuestas facciones “se pusieran de acuerdo” y dejaran de “marearles”, toda vez que parten de la base de que su postura “no va a ser tan determinante” como la del propio PSOE-A.
Y es que Santiago Sánchez y su entorno siguen teniendo claro que no van a integrarse en un gobierno de coalición con los socialistas, hasta el punto de insistir en la idea de que el “voto de confianza máximo” que pueden ofrecer este próximo sábado es el de respaldar la investidura de Mamen Sánchez como alcaldesa para de este modo impedir que siga gobernando el PP. “Que hayamos planteado nuestro apoyo a la investidura de Mamen Sánchez como alcaldesa es de hecho un voto de confianza muy alto por nuestra parte, porque venimos de sufrir las políticas socialistas y de hecho España, Andalucía y Jerez están así gracias al PSOE”, apostilló, dando a entender que la postura de Ganemos es ya inamovible.
No en vano, el propio Santiago Sánchez sacó a colación la reciente detención de “20 altos cargos de la Junta”, lo que a su juicio evidencia que los socialistas “tienen una trayectoria y una historia” tras de sí que “no le convierten en el socio de gobierno ideal”.
Con siete sí se puede
Los argumentos del PSOE para rechazar la posibilidad de gobernar sin más apoyo que el de su propio grupo municipal -que estará integrado únicamente por siete concejales- no convencen en absoluto a Santiago Sánchez, que entiende que la ciudad “se puede gobernar perfectamente con siete concejales”. En este sentido, estimó que el desarrollo de las iniciativas comprometidas en su programa electoral “depende de los técnicos y los profesionales” del Ayuntamiento, ya que “los concejales no pintan rayas ni hacen obras, eso lo hacen los trabajadores”.
A este respecto, incidió en que el “cambio” que proponen en la forma de hacer política pasa por contribuir a la gobernabilidad del Consistorio desde la oposición. “Si el PSOE es coherente y cumple con su palabra y con su programa no tendría problemas para gobernar. Si realmente van a cumplir lo que están diciendo vamos a ser leales y si van a llevar a cabo políticas que nosotros creemos que son buenas, no van a tener problemas en el Pleno. Nosotros ofrecemos lealtad. Ahora, si no cumplen con su palabra van a tener un enemigo muy fuerte. El problema del PSOE es que entre las palabras y los hechos... Por eso es normal que no nos planteemos gobernar con ellos”, sentenció.
La negativa de Ganemos a integrarse en el Gobierno -y la del PSOE de no gobernar en minoría- tiene como consecuencia que el PP siga al frente del Ayuntamiento, con lo que ni unos ni otros conseguirían el objetivo inicial de arrebatar la Alcaldía a María José García-Pelayo. Santiago Sánchez asume el coste de esta decisión, aunque carga la responsabilidad sobre las espaldas del PSOE.
“Hace poco me escribió una persona diciendo que si no pactábamos con el PSOE nadie nos iba a perdonar; y otra me dijo que si pactábamos con el PSOE nadie nos lo perdonaría. Optemos por la opción que optemos siempre habrá alguien que diga eso. En cualquier caso, la gente que se erige en portavoz de los votantes me parece prepotente, porque actúan como portavoces sin preguntarle a nadie”, zanjó Santiago Sánchez.
