En la ronda de intervenciones con motivo del acto de fin de temporada del Xerez Club Deportivo intervinieron el capitán del equipo, el propio entrenador, obviamente el gerente de la entidad que acogía el acto, bodegas Alvaro Domecq, y también lo hizo el presidente de honor de la entidad, Rafa Verdú, quien estuvo muy motivo y acordándose, dijo, de una película dijo aquello de que “si morimos, moriremos con las botas puestas” llevándose la ovación generalizada en un acto de convivencia donde se chocaron las copas de Fino La Janda en honor de la temporada realizada y donde se hicieron votos por la continuidad de la entidad una temporada más, aunque el asunto no depende de los que estuvieron en las bodegas sino que depende de que en estos meses de verano se sea capaz, por quien corresponda, que debe ser obviamente Energy, si es que sigue existiendo, de solventar los problemas que en estos momentos tiene el club. Unos treinta o cuarenta mil euros hacen falta para arrancar.