La iluminación del 46 por ciento de la ciudad es “incorrecta”, bien por exceso (30,2 por ciento) como por defecto (15,8 por ciento). Esa es la principal conclusión que puede extraerse de un informe técnico elaborado por el propio Ayuntamiento, que de algún modo justifica la necesidad de acometer inversiones encaminadas a desarrollar un sistema de ahorro energético.
El documento revela que el consumo anual del alumbrado público asciende a 15.867 MWh (megawatios por hora), lo que se traduce en una media por habitante de 76 kilowatios por año, una cifra “considerablemente inferior” a la media española, que se sitúa en 93 kilowatios por habitante y año.
En el municipio existen un total de 26.075 puntos de luz, la mayoría lámparas convencionales, tipo vapor de socio de alta presión (SAP), vapor de mercurio (VM) y alogenuro metálico (HM). El consumo total facturado en un año asciende a 15,8 millones de kilowatios, lo que se traduce en un coste algo superior a los tres millones de euros.
El documento reconoce que la renovación del alumbrado público constituye “una ventana de oportunidad para mejorar la sostenibilidad medioambiental del municipio”, estimándose que la introducción de nuevas tecnologías produciría un ahorro de un 60-80 por ciento, “con un impacto también notable en la contaminación lumínica global”.
Consumo global
Más allá del consumo del alumbrado público, el informe ofrece también algunos datos de carácter más general. En términos globales, puede decirse que Jerez consume menos electricidad por habitante que la provincia, un factor que viene determinado “por el consumo industrial”, que en otras zonas de la provincia tiene un peso mayor.
En cambio, en el resto de sectores el consumo de Jerez es siempre igual o superior al provincial, justificado por la dimensión y número de sus polígonos empresariales (comercio-servicios) y la mayor importancia relativa de la agricultura.
Así, el consumo total de energía eléctrica, sin contar el sector industrial, es de 2.917,0 kilowatios por habitante y año en Jerez y de 2.644,9 en la provincia, muy por debajo del límite máximo que establecen los criterios de sostenibilidad (10.000 kWh/hab).