Ante las nuevas cifras del paro desveladas este mes después del fin del verano, con más de mil desempleados nuevos y superada la cifra récord de más de 34.000 parados, los sindicatos parece que al fin están decididos a realizar algunos movimientos. Así, clamaron ayer por un pacto global por el empleo en el Campo de Gibraltar y pidieron tanto a las administraciones como a todos los agentes sociales y económicos que se sienten de una vez para tomar medidas concretas para la creación de puestos de trabajo.
Los sindicatos realizarán el miércoles una tímida protesta con la celebración de una concentración a las puertas de la AGE con motivo del Día Internacional por un Trabajo Decente y después volverán a implorar al Gobierno que para resolver la crisis tome medidas reales como aumentar la estabilidad contractual para bajar la temporalidad y frenar la destrucción de empleos, buscando ayudas, créditos y subvenciones al sector empresarial que son quienes finalmente crean ese empleo.
Y tienen toda la razón los sindicatos. Además también recordaron la insolidaridad que actualmente está exhibiendo la patronal (CEOE) que precisamente en el peor año de crisis económica ha frenado la negociación colectiva, un hecho que en los últimos 30 años jamás se había producido. Los sindicatos, también con la boca pequeña, volvieron quejarse de los Presupuestos Generales del Estado y volvieron a recordar que la inversión propuesta es totalmente escasa para solucionar los problemas reales; y se recordó una vez más las endémicas deficiencias en infraestructuras, llámese autovía A-48, y en el sector industrial que tienen visos de continuar una década más.
