El reparto a domicilio se está convirtiendo en la salvación de muchos hogares y en un alivio para el pequeño comercio tras mes y medio de confinamiento. Aunque desde que se decretó el estado de alarma está funcionando en cadenas de supermercados -no todas-, en pequeños negocios del centro e incluso en el Mercado Central de Abastos, a medida que avanzan las semanas se va incorporando a nuevos sectores como pastelerías, heladerías, restauración y floristerías. Este martes, La Rosa de Oro, un clásico en Jerez de la pastelería, abría tras más de un mes su establecimiento de Pío XII para atender en horario reducido de 10 a 14.00 horas de lunes a sábado y con reparto a domicilio de 15.00 a 18.0o horas. Lo hacían con todas las medidas de prevención de seguridad, dotando al interior del local de mamparas para guardar la distancia de seguridad, recomendando el pago con tarjetas y realizando las entregas de los pedidos en WhatsApp en el portal del edificio o urbanización.
“La gente que ha venido estaba muy contenta, diciéndome que ya tenía ganas de volver a tener los pasteles después de más de un mes”, señala Daniel Jiménez, al frente del negocio, que cree que ya ha llegado la hora de “probar suerte” e ir “calentando motores” para que los clientes de la zona y de otros puntos, aprovechando la buena accesibilidad, “se hagan a la idea de que hemos vuelto”. Jiménez es consciente de que “a mis clientes le tengo que dar un servicio” porque “llegan sus cumpleaños, sus cosas”, detalla, refiriéndose, por ejemplo, a efemérides como el Día de la Madre, que se celebra este domingo y para la que solo en la mañana de su primer día ya recibió llamadas para encargos.
El Día de la Madre también es el aliado perfecto para llenar de flores los hogares de nuestras madres, y más en tiempos de cuarentena en los que muchas familias llevan ya casi dos meses sin poder ver o abrazar a las suyas. En la floristería Enea, en la calle Fernández Viola, 3, especializada en ramos y todo tipo de decoración, se han visto obligados a aplazar todos los pedidos para las bodas para 2021, pero desde hace dos semanas su propietario, Javier Varela, ha vuelto a la carga preparando ramos para el reparto a domicilio. La acogida desde que lo puso en redes sociales y vía WhatsApp ha sido mejor de lo que esperaba. Está claro que el aislamiento social impuesto por la pandemia no entiende de aniversarios, cumpleaños y fechas como el Día de la Madre, para el que ya tiene más de 100 ramos encargados para entregar a domicilio este domingo.
En la heladería Different, en la avenida Lola Flores, también llevan poco más de una semana endulzando el día a día de los jerezanos repartiendo tarrinas y copas de helados, creps y gofres a domicilio. Un servicio que tenían previsto incorporar para la campaña de verano y que han decidido adelantar por la crisis del coronavirus. La respuesta ha sido tan positiva que han decidido mantenerlo también de lunes a viernes, puesto que su idea inicial era hacerlo sólo el fin de semana. “La gente está muy contenta, le pedimos un poco de paciencia a la hora de cuadrar los tiempos, pues podemos tardar 20 y 30 minutos, vamos con nevera y todas las medidas de seguridad, pero el pasado domingo tuvimos casi 50 desplazamientos”, señala el gerente, Rafael Hurtado.
Desbordados están en bar El Mirador, en el Parque Atlántico, desde que el pasado 21 de abril comenzaron su temporada de caracoles repartiendo a domicilio o con recogida en el local. Y es que si la montaña no puede ir a Mahoma...
