Los edificios anexos a la iglesia de San Juan de los Caballeros que impedían la contemplación de la zona del ábside del templo y el tránsito por varias calles de su entorno han empezado a ser derribados en estos últimos días.
La recuperación del entorno de esta iglesia es uno de los proyectos en los que viene trabajando el Ayuntamiento para revitalizar el centro histórico.
No en vano, esta actuación va a implicar la reapertura de una serie de viales situados a espaldas del templo que acumulan décadas de clausura, así como la demolición de estructuras adosadas a la propia iglesia.
La primera fase de este proyecto, que es la que se está ejecutando, tiene como objetivo transformar esta zona históricamente degradada y abandonada del centro histórico.
Se contempla la reordenación y urbanización de la calle Melgarejo y del espacio que rodea el ábside de la iglesia, definido por la finca de calle San Juan 3, así como la reapertura de la calle Siete Revueltas.
La superficie de actuación asciende a 1.037 metros cuadrados. Se incluye la demolición de edificaciones obsoletas y en desuso existentes sobre la finca de la calle San Juan 3, de titularidad municipal; la apertura de un nuevo vial público alrededor del ábside de la iglesia y su urbanización; la dotación de mobiliario urbano, con jardineras para árboles y nuevas farolas para el alumbrado público; y la reparación y adecentamiento del acerado.
Asimismo se llevará a cabo la limpieza y pequeñas reparaciones de la calle de las Siete Revueltas.