Juan Simón Carro Juan, conocido futbolísticamente como Simón, es un gallego nacido en A Coruña que se vivió en tierras gallegas hasta los 15 años, pero se siente más palentino que gallego. Entrena al Puerto Real C.F., líder de la Primera Andaluza hasta el cese de la competición por el coronavirus, y este sábado se la juega ante el Ubrique U.D. a partir de las 21:30 h en el Estadio Antonio Gallardo, con arbitraje del jerezano Víctor Bazán Muñoz. No hay vuelta atrás. “Para nosotros es importantísimo, partiendo de la base de que somos un equipo recién ascendido, aunque seamos el Puerto Real. En los últimos ocho o diez años la entidad no ha desaparecido de milagro. Esta es mi séptima temporada en el club. He pasado por todo, hasta de llevar balones de mis hijos al entrenamiento del equipo porque no había en el club. Imagínate las situaciones por las que hemos pasado”.
Simón es muy consciente de lo que se juega contra el Ubrique U.D. “Es verdad que tenemos una buena plantilla y buen equipo, pero mira lo que arrastramos. Además, no tenemos referencias para un partido que se juega en campo neutral, por lo que no existe el factor campo ni ningún premio por haber sido primeros. El Antonio Gallardo nos puede venir bien porque es grande comparado con el del Río San Pedro, de césped artificial y con medidas mínimas para un campo homologado. A mis jugadores les gusta más un campo grande y de césped natural”, recalca Simón, que no olvida la diferencia con el que les está sirviendo para preparar el playoff, de fútbol-7, al no haberse desinfectado el campo de fútbol del Río San Pedro, lo que ha obligado al equipo portorrealeño a utilizar un campo de reducidas dimensiones, pero dotado de césped artificial nuevo y la siempre socorrida playa. “Nos lo tomamos lo más profesionalmente que podemos porque para nosotros es vital ascender para seguir con la dinámica del último ascenso y reforzar el aspecto económico del club. Tenemos jugadores veteranos muy por encima de la treintena para los que podría ser su última liguilla y están como niños pequeños”, asegura el exdefensa del Puerto Real, que piensa que “ir a empatar el partido sería como clavarnos un puñal en el pecho”, que tiene la baja de Iván, que no quiere jugar por temor al covid-19, “y mucha gente cargada y tocadilla”.
Otro de los entrenadores inmersos en este playoff es Juanjo Durán, que también se queja de las bajas que sufrió su equipo, el Jerez Industrial, por las pruebas del coronavirus, “y empezamos más tarde de lo que nos hubiese gustado, pero estoy muy contento con la predisposición de los jugadores”. El Jerez Industrial se medirá el domingo a las 21:30 h al Balón de Cádiz arbitrado por el sanluqueño Abraham Hernández Maestre. “Nos hubiese gustado acabar la liga y que se jugara el playoff con público, que es la salsa del fútbol, y resulta raro hacerlo en un campo que no es el tuyo, pero es lo que hay. Tenemos que luchar por el ascenso y los cuatro equipos lo queremos”, precisa el míster industrialista.
La ventaja del empate al final no le sirve de mucho. “No pienso en empatar porque es muy probable que acabes perdiendo, pero nos vale para saber que el Balón tendrá que salir a ganar sí o sí. Es como haber logrado un buen resultado en su campo, pero con la salvedad de que no conocemos el campo ninguno de los dos equipos y de que todo es una incógnita, al ser el primer partido que jugamos tras cuatro meses sin jugar”, reconoce Durán, que admite el favoritismo de los gaditanos al poderse reforzar con jugadores del Cádiz B y del juvenil de División de Honor. “El Balón es muy buen equipo y creo que va a ser el que mejor llegue de forma a Arcos, pero va a ser un choque muy igualado que se decidirá por pequeños detalles”, avanza Juanjo Durán.
