El servicio se ha realizado después de que algunos de los profesionales del taxi que trabajan en el recinto portuario se dirigiesen a la Policía Portuaria informando que habían detectado la presencia de un conductor sospechoso, que conducía un vehículo Mercedes 190 matriculado en Málaga, y que ya había captado dos clientes, uno de ellos en el puerto y otro en la estación de autobuses, para trasladarlos hasta el aeropuerto de Málaga, por lo que les había cobrado cien euros.
Los agentes portuarios dieron aviso a la Policía Local, cuyos efectivos interceptaron el vehículo en la Avenida Virgen del Carmen, identificando a su conductor, un marroquí con permiso de residencia y domiciliado en Coín. Los dos viajeros, al ser informados de los hechos, decidieron continuar su viaje hasta Málaga en un taxi regular, después de que el conductor del vehículo ilegal les devolviera el dinero.
El vehículo ha sido inmovilizado y esta persona denunciada por infringir el Reglamento de Ordenación del Transporte Terrestre, siéndole impuesta una sanción de 4.601 euros, que hasta que no sea abonada conlleva la imposibilidad de retirar el automóvil del depósito al que ha sido trasladado.