La Asociación Vecinal del Centro Histórico de Jerez reclama más vigilancia policial en la zona tras el último incendio de dos turismos estacionados en la calle Luis de Ysasi, junto a la Plaza Belén, a una de la madrugada del pasado sábado. Un acto vandálico del que, por el momento se desconoce las causas, aunque todo apunta a que fue intencionado, y que, a juicio de este colectivo, “evidencia la falta de seguridad” que acusa este enclave. Así lo denuncia la presidenta de la asociación, Tamara Jiménez, a quien le consta la preocupación de los residentes de la zona por este episodio, que se suma a los destrozos que últimamente han sufrido otros coches aparcados, como rotura de lunas y espejos retrovisores.
“Esta situación demuestra la necesidad de seguridad. Se nota la marcha de la Policía Nacional de la zona, por eso reivindicamos que haya un aumento de seguridad”, apunta Jiménez para referirse al traslado de la Comisaría del Cuerpo de la Policía Nacional de la Plaza del Arroyo a La Asunción en las semanas previas al estallido de la pandemia mundial, es decir, hace más de un año. Precisamente, esta asociación de vecinos, junto a Acoje y otros colectivos y empresarios, constituyeron en su día una plataforma ciudadana para impulsar una comisaría en el distrito centro de Jerez, llegando a proponer sedes como San Agustín. Si bien se adelantaron en el tiempo, y empezaron a moverse con bastante antelación a la mudanza de los efectivos del 091, con el objetivo de que este punto policial estuviera operativo una vez que la Comisaría empezara a operar en el barrio de La Asunción, lo cierto es que ha transcurrido más de un año y sigue sin concretarse nada, y el déficit de seguridad, a juicio de los vecinos, empieza a pasar factura en el casco antiguo. El último emplazamiento oficial que transcendió, a propuesta del Ayuntamiento de Jerez incluso, fue la actual sede de Acoje, en la calle Larga, al ser el “más idóneo” para albergar un punto policial conjunto, como llegó a decir la propia alcaldesa Mamen Sánchez.