En estos días conmemoramos el
Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza, algo que debería ser más que un día que conmemorar, y es que nuestra labor para acabar con la pobreza debe ser una
labor diaria hasta conseguir el objetivo de pobreza cero.
Al escribir estas letras, no puedo dejar de recordar tal como venimos haciendo desde hace años desde
UGT Sevilla que es nuestra histórica Sevilla la que sigue teniendo un lugar dominante en un
ranking que a todos debería
avergonzarnos, “estar entre los barrios más pobres de España”: En 2023
encabeza la lista el Polígono Sur, en el número dos del mismo se encuentran los barrios de
Pajaritos y Amate del distrito Cerro Amate y en el número cuatro,
Entreparques.
El objetivo de todas las acciones que con el fondo de estos días se llevan a cabo en toda Sevilla no es otra que la de
exponer la dramática situación de vulnerabilidad y exclusión social que padecen los vecinos de los barrios más desfavorecidos y la falta de atención que reciben de las instituciones y empresas que condicionan el modo de vida de los residentes.
Lejos de cualquier estadística y para analizar el día a día las personas que viven en todos estos barrios, nos encontramos con los
cortes de luz derivados de la
precariedad de las instalaciones y esto significa pasar mucho frio en invierno y mucho calor en verano, las carencias y deficiencias en cuestiones de
limpieza,
educación y seguridad ciudadana, sumados a un conjunto de medidas necesarias para sacar de la lista negra de los barrios más pobres de Europa a una zona en la que los vecinos denuncian la falta de atención, alegando que a ellos solo se les visita en campañas electorales y el resto del tiempo no cuentan para nada, sin contar que el ayuntamiento responsable de la limpieza de los mismos, a pesar de su promesa de “zafarrancho” lejos de aplicar una mínima limpieza, ha empeorado las condiciones que tenían antes de las elecciones municipales.
UGT Sevilla hace años que trabaja en proyectos que visibilicen la realidad de esta Sevilla que es la de todos y todas ,o eso al menos entendemos que debería ser y con motivo del
Día internacional por la erradicación de la pobreza queremos hacer un
llamamiento a los gobiernos central, autonómico y municipal para que coordinen sus esfuerzos y pongan en marcha acciones efectivas en estos barrios con el objetivo de que las familias que viven en estas zonas superen la pobreza y la exclusión
que lo hagan de manera urgente y que esto sea una realidad y no palabras que se las lleva el viento.
Siempre que analizamos las
razones que se ocultan detrás de la pobreza llegamos a los
salarios precarios que han hecho real la figura del
trabajador pobre que no llega ni a mitad de mes con su trabajo y en este sentido en
UGT trabajamos con el gobierno de la nación para intentar paliar un mal estructural que permita un trabajo digno, una parte de ella, evitando la rotación de contratos de días, meses …y llevando a
contratos indefinidos, ese es el camino que comenzamos con la aprobación de la
reforma laboral, un camino que debe culminar en este mandato con la subida de salarios, con modificar las causas de despidos y las indemnizaciones, entre otras muchas tareas que nos hemos puesto como objetivo.
Y si está es la situación que tienen los que tienen un empleo, imaginemos la de personas desempleadas,
53.947 sevillanos y sevillanas se han quedado sin ningún tipo de prestación, es decir, un 31,38% de las personas en paro, no son números, son familias sin ningún tipo de prestación, parados de larga duración, personas que ya han perdido toda esperanza de encontrar empleo.
Desde el sindicato que dirijo en Sevilla, tenemos la convicción de que
la pobreza y la desigualdad no son inevitables, son el resultado de la
falta de medidas que afectan a los más desfavorecidos de nuestras sociedades
y que vulneran de manera clara sus derechos fundamentales para llegar a esta conclusión solo hace falta analizar qué sucede en los barrios más vulnerables que les diferencia de los demás. Entre otras es necesario señalar que las personas en estos barrios tienen
los ingresos más bajos de toda España, que las
tasas de desempleo y precariedad laboral en estos barrios
duplican las medias de nuestras ciudades, el
absentismo, el fracaso y el abandono escolar son obstáculos para el desarrollo de los jóvenes, hay dificultades de las personas y familias satisfacer sus necesidades básicas, como
educación, vivienda y atención médica, muchas familias no pueden acceder a
tecnologías y comunicación debido a su situación económica y precariedad laboral y es que en estos barrios, muchos hogares
no pueden pagar ni siquiera la electricidad para los servicios más básicos.
No quiero cerrar estas líneas sin poner el
acento en la situación de los
inmigrantes que se asientan en Sevilla formando poco a poco
especies de guetos, son personas que
no pueden pagar el alquiler ya que apenas tienen para comer y se sitúan en los
barrios más pobres como los Pajaritos, Macarena, etc…
Es el momento de una
apuesta clara por los que más lo necesitan y por eso volvemos a reivindicar la construcción de
más viviendas para los jóvenes y sobre todo para personas
trabajadoras pobres que no pueden cubrir sus necesidades más elementales con sus sueldos.
Ha llegado la hora de
promover empleos de calidad que dignifiquen a los que menos tienen, tenemos una ciudad con los barrios más pobres de España y es hora de que la derecha deje los debates morales y se dediquen a
trabajar por todos los sevillanos y sevillanas, de eso va gobernar.
Y es que si para algo tiene que servir días conmemorativos como este es, por un lado, para
situar en el mapa la realidad de nuestros vecinos y sobre todo, para
buscar soluciones que acaben de una vez con
una situación que es evitable,
dura ya demasiado tiempo y nos debería avergonzar como sevillanos y sevillanas.