Tres condenados por maltrato por tener 105 perros en situación "deplorable"

El Juzgado de lo Penal número 3 de Málaga ha condenado a tres responsables de una asociación protectora por un delito de maltrato animal tras comprobarse que tenían 105 perros en situación de abandono y con un estado de salud "deplorable".

En la sentencia, a la que ha tenido acceso EFE, se explica que cuando los animales fueron intervenidos por el Seprona y examinados por dos veterinarios detectaron "el grave riesgo sanitario y contagio de enfermedad zoonótica que presentaban".

Estaban infectados de leihmannia, sarna y, además presentaban lesiones como alopecia, dermatitis, prurito intenso, pulgas, delgadez, apatía, lesiones con úlceras infectadas, descarnación de la nariz y secreciones en la mucosas nasales, sin haber recibidio, según informe de los facultativos, ningún tipo de asistencia veterinaria.

Además se les observó solo pequeños restos de comida en el momento de la intervención, se destaca en los hechos probados de la resolución judicial, que precisa que muchos de ellos, pese a los cuidados posteriores, seis meses después de ser intervenidos, solo vivieron 42 perros.

Los tres acusados eran los máximos responsables de una asociación protectora de animales en la localidad malagueña de Rincón de la Victoria, colectivo que contaba con un recinto de 200 metros cuadrados en el Cortijo Maroto.

La parcela estaba vallada con restos de residuos y algunos de ellos de material punzante, "no tenía sistema de alcantarillado y desagüe para la extranción de aguas o excrementos".

Los ahora condenados eran la presidenta, vicepresidenta y secretario de la asociación y eran los encargados de recoger y tenerlos en custodia a los animales "bajo la pretendida apariencia de asociación protectora de animales".

Los acusados han sido condenados por un delito continuado de maltrato animal y se les impone a cada uno la pena de 15 meses de prisión e inhabilitación especial para profesión u oficio relacionado con animales y para su tenencia durante un periodo de tres años.

Además tendrán que indemnizar al centro que se hizo cargo de los cuidados de los animales en la cantidad que se determine, según señala la sentencia, en la que se insta a que una vez sea firme se deduzca testimonio respecto de uno de los testigos por un posible delito de falso testimonio.