Había ganas de ver a la Patrona de Málaga, a Santa María de la Victoria en las calles de Málaga y acompañarla en el regreso a su templo. Porque hablamos de un encuentro que no se producía desde 2019, por los condicionamientos derivados de las diferentes medidas adoptadas a causa de la pandemia del Covid-19.
Vivida ya la novena a la Virgen, el jueves, el día festivo de la capital dejó los primeros momentos devotos y emotivos con la ofrenda floral y con la Santa Misa presidida en la Catedral por el Obispo de Málaga, Jesús Català con el acompañamiento musical de la Coral Santa María de la Victoria.
La tarde, fue el tiempo para el encuentro multitudinario con los fieles, en una procesión por las calles del Centro Histórico capitalino que la devolvió a su templo por el siguiente recorrido: Patio de los Naranjos, Santa María, Molina Lario, Plaza del Obispo, Molina Lario, Strachan, Torre de Sandoval, Bolsa, Marqués de Larios, Plaza de la Constitución, Granada, Calderería, Pza. Uncibay, Casapalma, Cárcer, Madre de Dios, Plaza de la Merced (lateral oeste y sur), Plaza María Guerrero, Victoria, Plaza de la Victoria, Compás de la Victoria y Plaza del Santuario hasta el encierro en el templo.
Una jornada brillante, donde el tiempo acompañó, y en el que la virgen contó con los sones de la banda de cornetas y tambores del Real Cuerpo de Bomberos, que encabezó como es tradicional la procesión, mientras que la banda Municipal se emplazó a mediación del cortejo y la banda de música Maestro Eloy García de la Archicofradía de la Expiración acompañó al trono de la Patrona. Un acompañamiento que llenó de luz el procesionar de Santa María de la Victoria con sones como la Salve Marinera o Coronación, la marcha dedicada a la Virgen de los Dolores, una imagen que este año cumple su 275 aniversario, como destacaron desde la Hermandad de Santa María de la Victoria.
Málaga se encontró con la patrona de la ciudad y de la Diócesis, y la Virgen de la Victoria se reencontró con sus fieles y devotos.