Las
lesiones ahogan al Málaga, que quiere despedir la primera vuelta con más decencia este domingo en casa, ante un
CD Alavés herido y peligroso (21:00 horas). Para esa última cita liguera del tedioso año 2022, Pepe Mel contará con varios jugadores que no han terminado de abandonar la enfermería desde que comenzó la temporada.
El primero es
el defensa
Unai Bustinza, quien se ha perdido los partidos ante el Levante, el Granada y el Ibiza por una
fractura nasal. Ahora reaparecerá con una máscara protectora con la que ya ha entrenado este miércoles. A lo Alberto Díaz con el Unicaja, aunque sin esa condición de superhéroe, dará una opción más al técnico madrileño, que ya lo usó en La Rosaleda como lateral.
Bustinza se rompió la nariz en el entrenamiento previo al encuentro de la jornada decimoctava ante el Levante en el Ciutat de Valencia y, aunque no ha sido precisa su intervención quirúrgica. Junto a él también han entrenado este miércoles el centrocampista
Ramón Enríquez, que se cayó por problemas musculares en el calentamiento previo al encuentro de Copa del Rey frente al Peña Deportiva (1-1). Su presencia en el centro del campo siempre ha gustado a Mel, pero las lesiones no le dejan demostrar lo que prometía en el año de la pandemia.
La tercera alegría es el regreso del central
Andrés Caro, que sufrió en la eliminatoria copera la fractura de la falange de un dedo de su pie derecho. Se le ha visto en dinámica grupal y ya asoma su momento de, al menos, sentirse como una opción diferente para la zaga.
Por su parte, el delantero de origen marroquí
Haitam Abaida sigue pendiente de ser operado tras la rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda que se produjo en el enfrentamiento ante la Ponferradina, donde maravilló en sus 45 minutos de puro desparpajo.
De los 31 jugadores utilizados a lo largo de la temporada, Pepe Mel tiene a
11 lesionados y otros varios que aún no están al cien por cien.
Luis Muñoz o
N’Diaye, dos pilares en el centro del campo, son los casos más evidentes.
Pablo Hervías tampoco aguanta demasiado minutaje en rendimiento óptimo y
Fran Sol acaba de salir de un esguince de tobillo. Se echa especialmente de menos a un talento como
Álex Gallar, al que se le espera a su nivel para la segunda vuelta.