El Unicaja ya tiene sustituto después de la desafortunada baja de larga duración de Augusto Lima. Con persistencia y paciencia ha encontrado la mejor opción posible
. Yankuba Sima ha rescindido su contrato con la Reyer Venezia y se ha convertido en nuevo jugador del equipo malagueño para lo que resta de campaña.
Así lo confirmaba el propio club de procedencia en un comunicado oficial: "Umana Reyer [Venezia] comunica que se ha llegado a un acuerdo para la
rescisión consensuada del contrato con Yankuba Sima, ante la voluntad expresa del jugador de cambiar de equipo, con una fórmula que satisface a ambas partes".
A las 18:00 horas de este jueves lo ha hecho oficial el Unicaja CB, que ha informado de que el jugador será
presentado este viernes a las 13:45 horas en el Carpena.
El pívot internacional español regresa a la ACB tras su experiencia en Italia, donde no ha tenido los minutos que esperaba. Este miércoles se quedó sin jugar en el partido de Eurocup que su equipo disputó ante Ratiopharm Ulm, una clara pista de que las negociaciones estaban fructificando.
El equipo de Ibon Navarro ha conseguido cerrar una cesión de derechos hasta final de temporada con el BAXI Manresa, con quien habría que negociar la próxima temporada si hay deseo de ambas partes en continuar. Sima ha forzado al máximo para venir al ilusionante proyecto del Unicaja, que se había quedado huérfano de un perfil de físico imponente en la zona interior.
Sus credenciales hacen pensar en el refuerzo perfecto, dadas las circunstancias. Lima es irremplazable, pero pocos mejor que Sima para ello. Capaz de producir en ataque, es un perfecto aliado para los bases en el bloqueo y continuación, además de una garantía reboteadora (en defensa y en ataque) y, por supuesto, físicamente un portento con sus 2'09 metros y gran embergadura.
En su temporadón con el BAXI Manresa, el año pasado, promedió 7,6 puntos y 4,1 rebotes. En verano de 2022 firmó con la Reyer Venezia donde milita un excajista, Jayson Granger, pero ha acabado relegado al tercer pívot en la rotación. Ahora, en Málaga, pretende ser lo que fue en Manresa. Ibon Navarro quería tenerlo cuanto antes y, aunque la tardanza ha sido inesperada, ya tiene su regalo de Reyes tardío y estrictamente necesario.