El
personal de ambulancias de Málaga ha pasado de la concentración a la marcha con una
movilización desde la Delegación de Salud, en calle Córdoba, hasta el Hospital Regional. Esta mañana
han paralizado varias arterías importantes de la ciudad para
“visibilizar” la situación “caótica” y de “inseguridad” que atraviesa el servicio. “No podemos normalizar que las
ambulancias se queden en los arcenes averiadas o se incendien”, ha alertado Francisco Aranda, responsable de este sector en CCOO.
El transporte sanitario es “vital” para la atención médica de la ciudadanía. El personal que las conduce es el “
primero que acude a los accidentes y el que traslada a los pacientes a los hospitales”. Por ello, Aranda
no entiende por qué el Servicio Andaluz de Salud está “haciendo caso omiso” a las peticiones del comité de empresa: “No hacemos solo reivindicaciones laborales, con
sueldos congelados desde hace más de 10 años; estamos reivindicando que los
pacientes que necesiten una ambulancia sean atendidos con todas las garantías”. Según ha explicado, actualmente
no se está cumpliendo el servicio al “cien por cien”, por una flota de vehículos “averiados” y “
técnicos insuficientes para hacer los relevos, por falta de personal”.
Esta “
encrucijada de conflictos laborales y judiciales” es la consecuencia de la
“paralización” de la firma de la nueva licitación. El personal está “agotado”. “No podemos ver publicadas nuevas contrataciones por la Junta de nuevas ambulancias y que estemos preguntando dónde han puesto a esas unidades y qué número de trabajadores se han contratado para poder conducirla”, ha manifestado, asegurando que ante sus preguntas “
no tenemos respuesta ni del SAS ni de la empresa y no nos queda más remedio que
continuar con las movilizaciones”.
El delegado de CGT, Juan Antonio Fernández, ha respaldado las palabras de su compañero y ha insistido en que el
principal motivo de sus protestas es buscar el “bienestar de la ciudadanía”. “Llevamos varios años luchando”, ha dicho, para que el SAS y ASM Asistencia Sanitaria, empresa concesionaria del servicio, “firmen la licitación con los nuevos presupuestos”.
“
En 2020 se firmó el convenio, pero aún no ha entrado en vigor por culpa de la licitación, la cual por ‘h’ o por ‘b’ se suele impugnar”, ha añadido Ángel Muñoz, delegado de UGT. Los sindicatos piden que “salga otra vez la licitación y que
se cumplan los convenios” con un
presupuesto que mejore sus condiciones laborales y salariales, modernice la mayoría de los vehículos y aumente los contratos para hacer frente a la alta demanda.