Nueva prueba de fuego la que esperaba al Unicaja de Málaga, esta vez en tierras francesas. Los verdes visitaban la cancha de un Cholet Basket que venía, al igual que ellos, de ganar su primer partido en esta nueva ronda de la Basketball Champions League.

Esto hacía presagiar que sería un partido intenso, con oportunidades para ambos, y lo cierto es que no decepcionó. Finalmente, la mayor solvencia sobre la pista de los pupilos de Ibon Navarro sirvió para llevarse el gato al agua por un resultado final de 74 a 86.

Empezó bien el encuentro para los intereses cajistas. Un triple de Djedovic, así como cinco pérdidas por parte del Cholet ponían un claro 4-16 en los primeros minutos de juego. David Kravish comenzó desde muy temprano a hacer un roto en la pintura gala. El estadounidense se encuentra en un gran momento de forma y su equipo lo notó, tanto en defensa como en ataque (terminó el partido como máximo anotador, con 16 puntos).

Apretó el Cholet en los minutos finales del primer cuarto, lo que propició que se acercara en el marcador para el 22-29 final. 

Los locales seguían fallando tiros, mientras que los costasoleños se mostraban seguros en la parcela ofensiva. Un triple de Will Thomas puso los diez puntos de diferencia, una cantidad que se mantendría durante buena parte de este período.

Un intercambio de canastas permitió al Cholet acercarse en el electrónico hasta lograr el empate a 43. Una canasta de Kalinoski permitió llegar al descanso con una renta mínima de dos unidades (45-47).

El tercer cuarto fue sufrido por parte del Unicaja. El cuadro francés se lo creyó y puso una marcha más, tras terminar el segundo cuarto en una gran forma. El incombustible Craig Randall II, que terminó máximo anotador del encuentro con 20 puntos, hacía estragos en la defensa visitante.

Los puntos de Sako y Ayayi pusieron por delante a un Cholet que comenzaba a creer en la victoria (61-57). Terminó el cuarto con cinco puntos de ventaja para los franceses.

Los minutos fueron pasando y el último cuarto seguía con una igualdad palpable. Fue en los últimos minutos cuando Unicaja sacó todo su poderío físico a relucir. Unos tiros libres de Djedovic devolvían la ventaja al equipo español (69-70).

Carter comenzó a declinar la balanza de forma definitiva, a base de triples. Alberto Díaz, con otra canasta de tres, ponía los diez puntos de ventaja para su equipo. Las revoluciones finalmente bajaron y los verdes pudieron celebrar su segunda victoria en dos partidos, para afianzar la primera posición del grupo.