A Málaga le espera
un verano seco y uno de los más calurosos de su historia. Con mayo a punto de acabar, la provincia se adentra en la época veraniega con
unas temperaturas que “ya están por encima de lo normal”. Junio, julio y agosto estarán entre los
meses “más cálidos” de la historia. Una tendencia que no sorprende, porque
el verano pasado fue “más cálido de los últimos 30 años”, ha informado el director del Centro Meteorológico de Málaga (Aemet), Jesús Riesco.
Temperaturas especialmente altas que
irán acompañas de la ausencia de precipitaciones, algo normal en la provincia: “
Todos los veranos son secos en Málaga”. “Entramos” en una época en la que es “
muy difícil encontrar algún episodio que pueda producir lluvias destacables”, ha indicado, asegurando que “hasta finales de agosto no se esperan tormentas, a excepción de alguna puntual y muy localizada en el interior”: “Se espera que este verano sea incluso
un poco más seco de lo normal”.
Habrá que esperar a septiembre para la llegada de alguna Dana, que provoque
precipitaciones “intensas y locales en parte de la provincia”; aunque para estas fechas se prevé una “
situación algo más seca de lo normal”.
La
calima sí visitará la provincia, algo que es “bastante habitual”, debido a la circulación atmosférica procedente del sur. Serán “frecuentes”, pero “no muy intensas”, ha matizado Riesco.
Predicción para los próximos días
Va a continuar un periodo de “estabilidad” con ausencia de precipitaciones. Sin embargo, a partir de mañana “va a cambiar el régimen de viento en superficie de poniente a levante”, lo que significa un cambio en el patrón de temperaturas.
En la Costa del Sol y la capital, el levante va a hacer que se refresquen las máximas, bajando las temperaturas a “valores normales de 24 o 25 grados”. Mientras que en puntos del interior, como Antequera o Ronda, las temperaturas van a “subir” y pueden quedar al final de semana máximas “por encima de los 30 grados”.