El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, ha afirmado este viernes que las demandas interpuestas por su familia contra la Junta de Andalucía y el propio Ayuntamiento reclamando el pago de la expropiación de una casa de su madre es una "anécdota". A su juicio, "lo preocupante para la ciudad" es la paralización del plan de las 'tecnocasas', que impulsaba el Gobierno andaluz y en el que se incluía esta vivienda.
Más aún, el primer edil malagueño ha explicado a los periodistas que la reclamación en los tribunales a la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) "es un aspecto puramente técnico, formal, para dar solidez a la propia reclamación ante la Junta".
Así, ha justificado esta demanda contra la Administración que él dirige, según la explicación que le ha dado un sobrino, encargado de llevar este asunto al ámbito judicial, aludiendo a que si se dirigía solo a la Junta, "el proceso se quedaba incompleto, ya que el Ayuntamiento expropia por encargo del Gobierno andaluz y con sus fondos". "Ha hecho bien el abogado familiar mío al presentar la reclamación a los dos", ha apuntado.
"Es un tema anecdótico, puramente técnico y no tiene mayor importancia", ha reiterado el alcalde, incidiendo en que "lo que importa es que se haya paralizado una acción que se explicó en 2005 como muy positiva para la ciudad y que así fue aplaudida", en referencia al plan de las 'tecnocasas'. Por ello, ha opinado que lo que hay que hacer es "estimularlo".
Para De la Torre, lo sucedido "es una demostración de que si una Administración es lenta, es normal que los ciudadanos reclamen, sean del mundo público o del privado, concejales o alcaldes". "Cada uno, en la condición de ciudadano ejerce su acción de una manera que entiende que es legítima hacerlo", ha comentado.
Ha indicado que se enteró de estas demandas "a posteriori, varios meses después", dejando claro, de todos modos, que "entiende" la postura de sus siete hermanos ante la inactividad en la tramitación de este expediente para el pago por la enajenación forzosa de la finca de su madre, ubicada en la calle Rosa Blanco. El justiprecio acordado alcanzaba los 183.733 euros, cantidad a la que habría que sumar los intereses acumulados.
Además, ha dejado claro que "no puedo frenar ni anular la acción que pudieran hacer otros copropietarios, en este caso mis hermanos, que han entendido la necesidad de recordar que si hay una expropiación, hay que pagarla".
"YO VOY ARRASTRADO"
En este punto, De la Torre ha precisado que "yo voy arrastrado por el hecho en sí", en tanto que se trata de un bien proindiviso. "No es una acción de una propiedad cien por cien mía --ha especificado-- ni yo he tomado esa iniciativa, sino que es una acción arrastrada".
Ante esto, se ha preguntado "qué hago, cómo me quito la propiedad de esa octava parte", respondiendo que "no es tan fácil, ya que tendría que transferirla a mis hermanos, que me la compraran". En cualquier caso, ha considerado "fuera de lugar" llegar a ese extremo.
El regidor ha hecho hincapié en que, para demostrar "una colaboración positiva" su familia propuso a la Junta y al Ayuntamiento en 2007 y en 2011 poner a disposición ese suelo "sin exigir ningún previo pago", de modo que los proyectos previstos se pudieran desarrollar.