Los investigadores del crimen de Alejandro Rodríguez, de 3 años, cuyo cadáver fue encontrado la madrugada del martes en una balsa de agua en Los Montes de Málaga, intentan dirimir si el supuesto autor de los hechos, el compañero sentimental de la madre, ha cometido un delito de homicidio o asesinato.
Según han dicho a Efe fuentes cercanas al caso, el arrestado, A.F.A., de 23 años, continúa detenido en dependencias de la Guardia Civil de Rincón de la Victoria y no será puesto a disposición judicial hasta que los agentes finalicen varias declaraciones que consideran importantes para el procedimiento.
Debido a ello, previsiblemente se agotará el plazo máximo para la puesta a disposición judicial de 72 horas, que expira mañana.
Los agentes también intentan confirmar si el detenido envió un mensaje a la madre del menor y dónde lo hizo, ya que ello podría ayudar a determinar si hubo o no premeditación.
En su declaración ante la Guardia Civil, el joven no ha admitido en ningún momento haber acabado con la vida del menor, y tampoco ha dado argumentos para explicar por qué el niño se cayó a la balsa de extinción de incendios y no hizo nada para sacarlo de ella.
De las investigaciones se desprende que "había tensiones familiares" y que quizás el arrestado pensaba que el niño era un obstáculo para la relación sentimental con su madre.
Debido al estado anímico en que se encuentra, la madre del pequeño no ha prestado declaración hasta hoy y los investigadores barajan la posibilidad de hacer una reconstrucción de los hechos en las próximas horas.
El cadáver del niño fue encontrado en una balsa de Los Montes de Málaga donde los helicópteros suelen recargar agua para la extinción de incendios, lugar que podía conocer el detenido debido a su interés en la profesión de bombero, según las fuentes.
Durante la declaración que ha prestado ante la Guardia Civil, el detenido no se ha derrumbado y los agentes han insistido en preguntarle cómo estaba con el menor en un lugar tan apartado y recóndito, para intentar aclarar si pudo tratarse de un homicidio imprudente.
Hasta el cuartel de la Guardia Civil también se han acercado esta mañana dos psicólogos y ayer prestó declaración al padre biológico del niño, un teniente de la Guardia Civil destinado en Ceuta.
Las pesquisas apuntan a que Alejandro falleció alrededor de las 16.15 horas del lunes, antes de que el detenido denunciara su desaparición en un centro comercial de Rincón de la Victoria, lugar en el que no fue hallado.
Las cámaras de seguridad desmontaron el testimonio del detenido, que posteriormente ofreció varias versiones contradictorias y las fuerzas de seguridad buscaron al pequeño en una playa y acantilados, hasta que el joven, con la intermediación de un familiar, finalmente condujo a los agentes hasta la balsa de agua en Los Montes de Málaga.
El cuerpo del menor, que falleció por ahogamiento -según se desprende de la autopsia-, está previsto que se traslade en las próximas horas a Marbella, donde mañana se celebrará el funeral