De nada han servido los movimientos de las últimas horas. El comité de empresa de Limasa ha rechazado esta mañana la última propuesta del alcalde de Málaga, que pasaba entre otras medidas por no convocar huelgas hasta el 2017 y acabar con los puestos hereditarios en la empresa.
El presidente del comité, Manuel Belmonte, ha comparecido arropado por el resto de los representantes de los trabajadores para asegurar que no aceptan estas condiciones, que renunciar a futuras movilizaciones sería ponerles "la mordaza", y que para acabar con el conflicto el ayuntamiento debe aceptar lo fijado en el convenio 2010-2012.
Belmonte ha pedido disculpas a la ciudad por las molestias ocasionadas por la huelga, ha señalado que seis trabajadores han sido agredidos en estas jornadas, y ha critricado al alcalde del que dice que "no se puede ir de rositas", tras recordar que los socios privados de la empresa se han "llevado" 24 millones de euros en estos años " y de eso no se habla.
La última oferta del alcalde Francisco de la Torre pasaba por terminar con los puestos hereditarios en la empresa de limpieza municipal, y la firma de una cláusula de "paz social" que suponga renunciar a más huelgas durante este año y el próximo.
La propuesta ha sido enviada esta misma mañana por correo electrónico y se produce tras la realizada ayer por el comité mediante el mismo cauce para defender, entre otros asuntos, que los empleados descansen sábados y domingos de forma indefinida.
El alcalde, en un escrito con trece puntos, indica que quiere también que los días de huelga no sean abonables o compensables a los trabajadores y que el plan de vacaciones se aplique únicamente este año para después aplicar una sentencia al respecto.
