Málaga volvió este jueves a echarse a la calle en defensa de una educación pública de calidad. La capital se sumó así a la huelga general convocada contra la implantación de la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (Lomce), la reforma de la Ley Orgánica de Universidades (LOU) y los recortes en educación. Según estima el sindicato Comisiones Obreras, el paro general, el tercero desde que gobierno el PP en España, fue secundado por un 45% de la comunidad educativa en Primaria y un 95% en el caso de Secundaria y Universidad, destacando el caso del personal docente e investigador de la UMA que la ha seguido al 83%. Desde el Sindicato de Estudiantes cifraron el seguimiento del paro en un 90%
Estudiantes, profesores, padres y partidos como Podemos, Partido Socialista o Ciudadanos exigen un gran acuerdo social para impulsar un Pacto de Estado por la Educación. El secretario general de las Juventudes Socialistas, el malagueño José Carlos Durán, mostró su apoyo a la huelga y denunció que la Lomce “quiere expulsar del sistema educativo a quienes menos recursos tienen”.
También estuvo en la marcha, que recorrió en manifestación las calles del centro de la capital desde el ‘edificio negro’ al Rectorado de la Universidad de Málaga, el nuevo portavoz de Izquierda Unida, Guzmán Ahumada, que reclamó una educación pública “sin matices”, con la derogación de la Lomce, sin recortes y recuperando la plantilla docente. Málaga fue una de las 50 ciudades que en toda España gritaron por un futuro sin tijeras en las aulas de las generaciones de hoy y mañana.
