En el plazo de un mes, Partido Popular, Partido Socialista, Málaga Ahora, Ciudadanos, Málaga para la Gente y el edil no adscrito Juanjo Espinosa deberán sentarse en busca de consenso político para tratar de sacar adelante proyectos que llevan años enquistados en la ciudad como el metro, el conflicto de los bomberos, el futuro de los antiguos terrenos de Repsol, el proyecto para el Astoria-Victoria o el devenir del hotel de Moneo. Al menos, es lo que ha aprobado este jueves el pleno con 27 votos a favor tras la propuesta presentada por el grupo socialista, que presentó a Málaga como una ciudad “ingobernable” por el “agotamiento” del proyecto del regidor Francisco de la Torre.

Una “radiografía” que comparte Málaga para la Gente, que criticó la ausencia de “proyecto” de ciudad o la falta de participación vecinal que achacó Málaga Ahora, a favor de la iniciativa que consideraron “un tirón de orejas”.  Por su parte, el edil no adscrito, Juanjo Espinosa, que finalmente ha apoyado la moción, ha considerado la idea “un brindis al sol” y ha apostado por “hacer alternativa de ciudad”.


Mientras Ciudadanos criticó que el PSOE y el propio PP quieren “desestabilizar” la Casona, “unos para mover la silla y otros, para pescar en río revuelto”, defendiendo la estabilidad y el “clima de confianza” que ha otorgado el acuerdo de investidura, desde la bancada del equipo de Gobierno abogaron por el “máximo” diálogo, hacer concesiones y, sobre todo, evitar “tirarnos los trastos”.