Dos forenses han declarado hoy en el juicio que se sigue contra el exlegionario acusado de matar a puñaladas a un policía jubilado y han asegurado que el día del crimen el procesado no tenía alteradas ni limitadas su facultades mentales.
Los forenses han determinado que sufre un trastorno de bipolaridad pero que llevaba ocho años con medicación y que por tanto tenía plena conciencia de los hechos y han descartado que sufriera esquizofrenia como alegó ayer durante su declaración ante los miembros del jurado.
Los especialistas han concluido su informe asegurando que el acusado es plenamente imputable como mantienen la fiscalía malagueña y la acusación particular, que piden, en su escrito provisional, veintidós años por un delito de asesinato y tenencia ilícita de armas.
Durante la sesión de esta mañana también se ha visionado un vídeo donde se desmonta la versión que dio el acusado ayer cuando afirmó que había ido a ver a la víctima y que tras una discusión cometió el crimen, ya que se observa como lo acecha y en menos de treinta segundos lo apuñala dieciséis veces.
Además ha declarado la hija de la víctima, que ha explicado que su padre, de 74 años, tenía problemas de movilidad tras sufrir un ictus y por ello llevaba un carrito de compra para apoyarse, por lo que no pudo ni defenderse ni huir.
El crimen lo cometió el 23 de febrero del 2016, cuando el acusado se dirigió en Torremolinos al inmueble de la víctima y esperó a que éste saliera a la calle y en torno a las 8.20 horas lo apuñaló.
El acusado, de 63 años, aseguró durante su declaración que fue a verlo para hablar pero que hubo una discusión por revelar una cosa que le hicieron unos legionarios marroquíes y que "pasó lo que pasó".
Las acusaciones mantienen que el encausado sacó el machete que tenía oculto entre sus ropas y "con evidente ánimo de ocasionarle la muerte" le golpeó de forma repetida y sorpresiva dieciséis veces.
La víctima sufrió dieciséis heridas inciso punzantes en la cabeza, cuello, tórax, abdomen y espalda y falleció a consecuencia de las mismas tras sufrir un choque hipovolémico.