El pintor, ilustrador e historietista Sergio Mora acaba de publicar Las legendarias aventuras de Chiquito (Temas de Hoy), una biografía ilustrada que supone su estreno como biógrafo y narrador, como él mismo ha reconocido en un encuentro con los medios en el que ha destacado la figura del humorista, un ejemplo de humor que no buscaba hacer daño. A la hora de confeccionar este relato,
Mora detalla que la idea de centrarse en Gregorio Esteban Sánchez Fernández (Málaga, 1932), el humorista, cantaor de flamenco y autor que se escondía tras el pseudónimo de Chiquito de la Calzada, surgió de una conversación casual en las navidades de 2017. “Siempre me han llamado la atención los biopics”, ha precisado.
Así, a raíz de un encuentro en un restaurante japonés de Barcelona en el que estaban presentes su editora y su mujer, hablando con el dueño del local (Arito Katana, palmero y amigo íntimo de Chiquito) les reveló la relación que había mantenido con el humorista cuando actuaba en un tablao flamenco de Tokio y decidieron novelar la vida del cómico cuya infancia estuvo marcada por el hambre por lo que era habitual la expresión: “Pasábamos más hambre que el sastre de Tarzán”.
Mora ha indicado que, a la hora de escribir el libro, no quiso contar con la versión que aportaban las biografías, sino que recurrió a Internet y a las crónicas de los periodistas de la época. “No lo conocí pero, al igual que muchos españoles, estuvo en el salón de mi casa”, ha bromeado. Además, ha adelantado que próximamente se reunirá en Málaga con su sobrina (su heredera legal) con motivo de la presentación del libro. “Me ha basado en las anécdotas más legendarias aunque también hay una parte de fantasía”, ha añadido Mora para describir a Chiquito como “un humorista que no había estudiado ni había pasado por un filtro intelectual. Lo hacía por supervivencia”.
“Los chistes de Chiquito contradicen todo lo políticamente correcto pero tal y como decía las cosas derrumbaba a todos porque no había intención de hacer daño. Si eres negro y Chiquito te cuenta un chiste, te vas a reír”, ha asegurado. En sus comienzos, el cantaor actuó en Torremolinos, donde empezó en el tablao del Mariquilla, con quien estuvo cerca de 25 años. Fue una época en la que se codeó con actores de la talla de Marlon Brando y posteriormente tuvo que residir en Japón durante dos años por motivos laborales. Allí fue palmero de Paco de Lucía.