Adrián Miramón Quiroga volvió a coronarse por tercera vez en el Campeonato del Mundo de Remo de Mar en CM1x, que este domingo concluyó en Hong Kong (China). También logró una medalla de bronce en categoría doble mixto con Nadie Felipe.
Lo vi muy claro desde el principioEl remero malagueño llegó de competir el pasado fin de semana en el Mundial Sprint donde logró el oro en la misma modalidad individual en 400 metros. Miramón, que fue defendiendo los colores del Club Náutico Campello, suma su tercera corona en distancia de 6.000 metros, tras haber logrado anteriormente este gesta en Perú y en Mónaco.
Tras la competición, Adrián Miramón se mostró muy feliz y agradecido a sus patrocinadores, Málaga 2020 y Puerto Banús, sin los cuales su participación en este mundial no hubiera sido posible.
Según afirmó el remero malagueño, “en Hong Kong llevo desde el lunes y un poco asustado porque la semana pasada en China tuve bastantes problemas estomacales y fiebre, a pocos días del mundial. No estaba en mi mejor momento. La organización en general ha sido buena en este Mundial, aunque no tanto la coordinación de los barcos para entrenar. Solo he podido entrenar tres días de cinco”.
“El sábado tuve la clasificatoria y me encontraba súper bien. Eran tres tandas de barcos y en la mía coincidimos los que habíamos quedado segundo, tercero, cuarto y quinto en el mundial del año pasado, en el que yo fui cuarto. Por lo tanto, era una manga muy complicada y la gané con mucha solvencia. Lo vi muy claro y me fue muy fácil desde el principio”, apuntó.
“Mi entrenador de Campello confiaba mucho en mis posibilidades, yo no tanto, y me decía que si hacía las cosas normales, íbamos a ganar”, sentenció Miramón, quien hizo hincapié en que “en la final, la salida la he hecho un poco regular, pero enseguida nos pusimos en cabeza el alemán y yo. A partir de los 1.000 metros ya cogí el primer puesto de regata y empecé cada vez a meterle más distancia hasta llegar a los 3.000, donde estaba muy claro que si no había ninguna rotura u otro percance iba a ganar". "
"En los 5.000 metros le superaba en 30 segundos y pensando que luego tenía otra regata de doble mixto, decidí soltar. Los últimos 1.000 metros los hice casi rodando para guardar fuerza. Al final, creo que he entrado 15 segundos por delante”, dijo.
Por el contrario, “el doble mixto me ha resultado más duro. Mi compañera Nadia Felipe es muy buena remera y nos hemos acoplado bastante bien. En la final salimos primero desde el principio. Tuvimos también algo de suerte, y al final hemos podido conseguir el bronce, que también es un resultado muy bueno”, indicó el malagueño.