Un hombre se enfrenta a una petición fiscal de 22 años de prisión por abusar sexualmente de sus dos hijas menores y mostrarle pornografía cuando convivían con él tras recuperar el régimen de visitas al salir de prisión.

Las menores de 11 y 12 años estaban en Málaga con su progenitor los fines de semana alternos y periodos vacacionales, momentos en los que les realizó de forma continuada múltiples actos atentatorios contra la libertad sexual de las niñas, según el relato acusatorio, al que ha tenido acceso Efe.

Las víctimas sufrieron de forma habitual tocamientos, abusos y las metía en un cuarto que estaba cerrado con llave para ponerles vídeos pornográficos, y a una de ellas le llegó a decir que "la quería tanto que a lo mejor podrían tener un hijo los dos".

El juicio está previsto esta semana en la Audiencia Provincial de Málaga y se le juzgará por dos delitos continuados de abuso sexual con prevalimiento de una situación de parentesco y otros dos por exhibicionismo y provocación sexual.

La acusación pública pide que tras los años de cumplimiento de prisión tenga libertad vigilada durante ocho años por cada delito de abusos y quince años de prohibición de aproximarse a sus hijas a menos de 500 metros, a su domicilio, lugar de trabajo o cualquier otro sitio que frecuenten.