La invasión rusa sobre Ucrania, que comenzó el pasado 24 de febrero, ha provocado ya en este país un total de 4.074 muertos entre la población civil y otros 4.826 heridos, según datos difundidos este martes por la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
Según estos datos, actualizados a 30 de mayo, entre los fallecidos se encuentran 1.540 hombres, 1.014 mujeres, 93 niñas y 100 niños, así como 69 menores y 1.258 adultos cuyo sexo aún se desconoce.
La ONU cifró también que entre los heridos hay 971 hombres, 653 mujeres, 112 niñas y 137 niños, así como 166 menores y 2.787 adultos de sexo aún desconocido.
El documento publicado por la ONU recoge datos que incluyen a las víctimas provocadas por los ataques rusos desde las 04.00 hora local del 24 de febrero, hasta las 24.00 horas del 29 de mayo.
El organismo señala que las regiones de Donetsk y Lugansk, en el este del país y donde estos días se han recrudecido los combates, se han producido 5.037 bajas (2.307 muertos y 2.730 heridos)
En el territorio de estas regiones del Donbás aún controlado por el Gobierno de Kiev el número de muertos alcanza los 2.171 y el de heridos suma 2.161.
Mientras, en las zonas controladas por grupos armados afiliados a Rusia se han producido 136 muertos y 569 heridos.
En otras regiones de Ucrania repartidas por todo el país (Cherkasy, Chernígov, Járkov, Jersón, Kiev, Mykolaiv, Odesa, Sumy, Zaporiyia, Dnipropetrovsk, Poltava, Rivne, Vinnytsia y Zhytomyr), que estaban bajo el control del Gobierno de Kiev cuando se produjeron bajas los fallecidos ya sumaban 1.767 y 2.096 los heridos.
Según la ONU, la mayoría de las bajas civiles registradas se debieron al uso de armas explosivas con una amplia área de impacto, incluidos bombardeos de artillería pesada y sistemas de lanzamiento de cohetes múltiples, y ataques aéreos y con misiles.
El ONU cree que las cifras reales son considerablemente más altas, ya que se ha retrasado la recepción de información de algunos lugares donde se han producido intensas hostilidades y muchos informes aún están pendientes de corroboración.
Esto afecta, por ejemplo, a la asediada ciudad de Mariúpol (en la región de Donetsk), a Izium (región de Járkov) y Popasna (región de Lugansk), donde hay denuncias de numerosas víctimas civiles no contabilizadas.
Los informes de la ONU se basan en información que la Misión de Monitoreo de Derechos Humanos de la ONU en Ucrania recopiló a través de entrevistas con víctimas y sus familiares, testigos, análisis de material compartido confidencialmente con el propio organismo, registros oficiales, documentos de fuente abierta, materiales fotográficos y de video y registros e informes forenses, entre otros.
Todas las fuentes y la información se evalúan por su relevancia y credibilidad y se cotejan con otras informaciones. En algunos casos, la corroboración puede llevar tiempo. Esto puede significar que las conclusiones sobre las bajas civiles pueden revisarse a medida que haya más información disponible y las cifras pueden cambiar a medida que surge nueva información con el tiempo, precisa la oficina de la ONU.