La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, aseguró ayer que Batasuna es un partido ilegal, que no podrá presentarse “nunca” a las elecciones si no condena la violencia de forma clara y si no se separa definitivamente de ETA.

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros y preguntada por si el retraso en la tramitación del paquete de reformas para dificultar que Batasuna se presente a las elecciones es para que se desmarque de ETA, la vicepresidenta destacó que “no caben especulaciones” con este asunto.

Fernández De la Vega precisó que “se está pactando” ese paquete de medidas, pero ello no supone, “de ninguna manera”, que se vaya a “permitir, rebajar o relajar” ninguna de las actuaciones de vigilancia para que nadie pueda utilizar el fraude a la ley.

Fernández de la Vega subrayó que en este asunto “no hay cambios en la posición del Gobierno”.

Además, aseguró que “los terroristas ya lo saben -continuó-, solo cabe una opción, que es el abandono de las armas de una vez y para siempre”.

Por su parte, el ministro de Justicia, Francisco Caamaño, habló también sobre la posibilidad de que Batasuna pueda presentarse a elecciones y negó ayer que el Gobierno prepare su legalización ante el cese de la violencia que la izquierda abertzale podría negociar con ETA de cara al próximo verano.

“En principio, no”, respondió el ministro de Justicia a la pregunta de si prepara el Gobierno la legalización de Batasuna.

“Los partidos ilegales son partidos ilegales”, añadió Caamaño.

El ministro de Justicia apuntó que Batasuna y todo el entorno político del nacionalismo vasco “sabe que sólo desde la legalidad y el respeto a los derechos y libertades y de manera clara y terminante pueden estar en nuestro sistema democrático”.

Por otro lado, Francisco Caamaño reiteró la petición a la banda terrorista ETA de que abandone la violencia: “Lo que tiene que hacer es abandonar de manera clara y definitiva la violencia contra los demás”, subrayó.