Rusia denunció hoy un ataque ucraniano con drones contra la ciudad de Nueva Kajovka, en cuyas cercanías se encuentra la presa que fue objeto de una voladura el pasado día 6 en la región sureña de Jersón y provocó graves inundaciones que solamente en la parte ocupada por Moscú causó decenas de muertos.

En el ataque, según la versión rusa, resultaron heridas tres personas, una de ellas, una mujer de 35 años, se encuentra en estado grave, según la sede operativa de la ciudad, ubicada en el lado izquierdo del río Dniéper en Jersón, recoge la agencia oficial TASS.

Las inundaciones, provocadas por la voladura de la presa de Kajovka, de la que se acusan Rusia y Ucrania mutuamente, ha desplazado a unas 8.100 personas en la margen izquierda del río controlada por Rusia y provocado 115 hospitalizaciones.

Según los últimos datos oficiales de las autoridades rusas, al menos 38 personas fallecieron en el desastre.

El Centro Nacional para la Resistencia ucraniano cifró la víspera en "más de 500" el número de muertos en el territorio ocupado por Rusia como consecuencia de las inundaciones.

El gobernador interino impuesto por Rusia en Jersón, Vladímir Saldo, dijo el viernes pasado que 12 de las 35 localidades que estaban inundadas se encuentran fuera de la zona de peligro.

La agencia sanitaria de Rusia monitorea actualmente el riesgo de enfermedades infecciosas por el desastre.

Las autoridades aseguran que la situación es estable.

Hasta el momento fueron vacunadas 2.140 personas contra la hepatitis viral, 1.921 contra la disentería y 53 personas contra la fiebre tifoidea.