Se trató de la primera vez que el Ministerio de Defensa confirma una aproximación tan cercana por parte de aviones chinos al territorio taiwanés
Un general del Ejército de Taiwán aseveró hoy que la isla "contraatacará" si detecta la incursión de buques y aviones de guerra chinos "dentro de 12 millas náuticas" de su espacio marítimo y aéreo.
El general, Lin Wen-huang, aseguró -en declaraciones que recoge hoy la agencia oficial CNA- que las fuerzas armadas isleñas siguen con atención las "actividades militares" del Ejército chino, especialmente si cruzan la mediana del Estrecho de Formosa y se aproximan aún más a la costa de la isla.
"Si el Ejército chino continúa ignorando nuestras advertencias y se abre camino en nuestro espacio aéreo, territorial y marítimo, contraatacaremos activamente para salvaguardar nuestra seguridad nacional", indicó.
Los comentarios del general taiwanés se producen después de que el Ministerio de Defensa de la isla denunciara el pasado sábado que al menos ocho aviones de guerra chinos cruzaron la mediana del Estrecho de Formosa, acercándose a la denominada "zona contigua" de Taiwán, ubicada a 24 millas náuticas de sus costas.
Se trató de la primera vez que el Ministerio de Defensa confirma una aproximación tan cercana por parte de aviones chinos al territorio taiwanés.
En respuesta a las maniobras del gigante asiático, Taipéi desplegó aviones, barcos y activó sus sistemas de misiles terrestres, un procedimiento habitual en estas situaciones.
Aunque el Ejército taiwanés siempre ha asegurado que no lanzará un "primer ataque" para evitar darle a China una excusa para una invasión, el ministro de Defensa Chiu Kuo-cheng, afirmó públicamente en marzo que eso no significa que las fuerzas taiwanesas no vayan a defender su territorio.
La mediana del Estrecho de Taiwán ha sido durante años una frontera no oficial pero respetada tácitamente por Taipéi y Pekín.
Sin embargo, los aviones del Ejército chino la traspasan constantemente desde agosto del año pasado, cuando la entonces presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, visitó Taiwán, un viaje que enfureció a China.
China reclama la soberanía de Taiwán, un territorio que considera una "provincia rebelde" desde que en 1949 los nacionalistas del Kuomintang se replegaron allí tras perder la guerra contra el ejército comunista.
La isla autogobernada es además uno de los principales motivos de fricción entre China y EE.UU., ya que el país norteamericano es el principal proveedor de armas de Taiwán y lo defendería en caso de conflicto.