Moratinos, que ha recordado que en estos momentos está en curso una investigación judicial sobre "los contactos de ETA en Venezuela", ha asegurado al diputado del PP Gustavo de Arístegui, que le interpeló hoy en el Congreso, que "el Gobierno va a exigir plenamente una respuesta definitiva de las autoridades venezolanas".
Asimismo, ha prometido que el Ejecutivo empleará "todos los mecanismos políticos, diplomáticos, judiciales, policiales para derrotar a ETA y hacerles volver de Venezuela".
El ministro, sin embargo, no hizo mención a la ausencia de la bandera venezolana en el desfile de ayer en Madrid, que según De Arístegui fue la "guinda" tras las "repugnantes" declaraciones que el embajador venezolano, Julián Isaías Rodríguez, hizo la semana pasada dando a entender que los dos etarras que han declarado haber recibido entrenamiento en Venezuela en el verano de 2008 fueron torturados o coaccionados.
Según el portavoz del PP en la Comisión de Exteriores del Congreso, el Ejecutivo sabía "bastante antes" de lo que ha dicho la ministra de Defensa, Carme Chacón, que la bandera venezolana no estaría entre las iberoamericanas que desfilarían con motivo del Día de la Hispanidad.
Asimismo, ha reprochado al Gobierno que crea "a pies juntillas" lo que dice Chávez y ha puesto en duda que el presidente venezolano no estuviera al tanto de que etarras estaban recibiendo entrenamiento en su país dado que existen "dos implacables servicios de inteligencia" que "lo saben todo" y dado que Cubillas está casado con la directora general de despacho del presidente.
Según De Arístegui, el Gobierno debería convocar al embajador venezolano para "exigir explicaciones y no información" sobre el "triángulo diabólico" entre ETA, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y Venezuela. El PP lo que quiere del Gobierno, ha resumido, es "firmeza".
Por otra parte, el diputado 'popular' también hizo mención en su interpelación para preguntar sobre las medidas que va a adoptar el Gobierno para defender los intereses de España y los españoles, a la ausencia de una defensa por parte del Gobierno de "la dignidad de la Policía y la Guardia Civil" tanto en este caso como en los sucesos de este verano en Melilla.
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A este respecto, reiteró que su partido es "transparente en su defensa de la españolidad de Ceuta y Melilla" lo cual no le impide mantener relaciones cordiales con los principales dirigentes marroquíes.
Asimismo, mencionó también la cuestión de Gibraltar y criticó la política adoptada por el Ejecutivo puesto que ha abierto la "tercera vía" y ha provocado la declaración del "derecho de autodeterminación" del Peñón; y se refirió igualmente a la "obsesión enfermiza" de Moratinos en pedir que la Unión Europea abandone la Posición Común que rige las relaciones con Cuba desde 1996 y las condiciona a avances en materia de Derechos Humanos.
Ante todas estas críticas, Moratinos ha replicado subrayando que el PP no ha ofrecido "soluciones que impliquen una defensa efectiva de los intereses de España y de los españoles" en ninguno de estos escenarios, ni cuando estaban en el Gobierno ni ahora cuando están en la oposición.
Asimismo, ha defendido, en el caso de Cuba, que durante el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero ha habido más de 60 presos políticos liberados y "habrá más", ha asegurado.
También ha mencionado entre los "resultados" alcanzados por el actual Ejecutivo que España haya estado presente en las reuniones del G-20, que se hayan mejorado las relaciones con los países vecinos, en especial con Marruecos, o que se haya logrado la liberación de los españoles secuestrados "de manera prudente y discreta" tanto en el Sahel como el golfo de Adén.
LA OPOSICIÓN TAMBIÉN DEBE DEFENDER LOS INTERESES DE ESPAÑA
Según Moratinos, "la defensa de los intereses de España y de los españoles requiere trabajar diariamente buscando resultados concretos, no haciendo declaraciones altisonantes que pongan en peligro" dichos intereses. A esa defensa se dedica el Gobierno, ha aseverado, "con prudencia, serenidad y compromiso en el ejercicio de su responsabilidad".
Pero esta labor, ha añadido, no es exclusiva del Gobierno, sino que también compete al "grupo mayoritario de la oposición" esa "responsabilidad".
Por eso, ha subrayado, cuando el PP "pide que se incremente la tensión de nuestras relaciones diplomáticas o que se produzca una ruptura de relación con países con los que tenemos intereses estratégicos o cuando intentan sacar réditos electorales de gestiones del Gobierno para liberar a ciudadanos españoles o cuando ponen en cuestión nuestra cooperación con países mediterráneos o del Africa Subsahariana (...) con esas actitudes no están ayudando a defender mejor los intereses de España".