Un hombre que responde a las iniciales J.L.T.S., de 35 años, ha ingresado en la prisión de Murcia después de ser detenido por la policía como presunto autor de los delitos de prostitución de menores, corrupción y provocación sexual, al engañar a dos jóvenes de 14 años a quienes chantajeó a cambio de sexo, informa este cuerpo.

El detenido se hacía pasar por ojeador de fútbol base en Internet para captar el interés de los adolescentes, y después motivarles un primer encuentro, llegando a sobornar con dinero y obsequios a ambos a cambio de recibir servicios sexuales.

Además contactó con las víctimas a través de programas de mensajería instantánea.

En otras ocasiones simuló ser una joven de aspecto atractivo que llegaba a enviar un vídeo de contenido erótico a cambio de imágenes similares de sus víctimas.

Una vez que contactaba con sus víctimas, el detenido intentaba obtener su confianza o chantajeaba a los menores con la amenaza de difundir imágenes o datos comprometedores para conseguir un primer encuentro personal con el fin de lograr servicios sexuales.

Los encuentros tenían lugar en habitaciones de hotel o en el propio domicilio del investigado, bajo la amenaza de revelar la relación a los familiares de los abusados.

La policía halló, en el registro domiciliario, material informático, el cual está siendo en estos momentos analizado por los especialistas en delitos tecnológicos de la Jefatura Superior de Policía de Murcia para comprobar cuál es su contenido y tratar de esclarecer otras acciones delictivas de similar naturaleza.

J.L.T.S. acababa de salir de prisión tras cumplir condena por hechos similares vinculados con la operación "Ruber" de la Policía Nacional, además está relacionado en la operación "Kova", después de intercambiar vídeos producidos por Álvaro Iglesias, alias 'Nanysex', el peor pederasta conocido en España, con otros pederastas arrestados en el año 2005.

El titular del Juzgado de Guardia ha decretado su ingreso en prisión el pasado sábado en que fue puesto a disposición judicial, añade la fuente.

La operación se mantiene abierta y la investigación policial continua a partir de los datos obtenidos y a la espera de lo que pueda arrojar el análisis de los equipos informáticos intervenidos.