El Alto Tribunal ha desestimado los recursos de los condenados, dos cabos y un soldado, contra la sentencia dictada el pasado mes de marzo por el Tribunal Militar Territorial Segundo, que les impuso penas de entre cuatro y diez meses de prisión por propinar el pasado 12 de mayo de 2006 golpes, patadas, puñetazos “y otros acometimientos físicos” a quienes hacían el papel de prisioneros en la simulación.
Los ejercicios tenían como objetivo saber qué conducta hay que adoptar en caso de ser capturado, por lo que los “prisioneros”, tras ser sujetos con las manos a la espalda con una brida y taparles los ojos, fueron sometidos “a un interrogatorio dirigido a obtener el nombre de los jefes de pelotón, sección y compañía, y que debía ser practicado o supervisado por los sargentos instructores”.